| Nieto del ex Presidente |
| PINOCHET MOLINA Y BAJA DEL EJÉRCITO: "ME DA UNA MALA IMPRESIÓN DEL GENERAL IZURIETA" |
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El nieto del fallecido general Augusto Pinochet, el ex capitán de Ejército Augusto Pinochet Molina, se refirió por primera vez, desde los funerales de su abuelo, al polémico discurso que le costó su salida de la institución castrense al apoyar públicamente la gestión del ex gobernante, manifestando que la determinación de expulsarle del Comandante en Jefe, Oscar Izurieta, "me da una mala impresión". En entrevista con TVN, Pinochet Molina, hijo de Augusto Pinochet Hiriart, dijo no sentirse arrepentido de sus dichos y aseguró que se trató de un acto "deliberado, pensado y no apasionado", por lo que consideró "exagerada e intolerante" la decisión del Ejército. De paso, no descartó que su salida obedeciera a presiones políticas "generalizadas". "Me da una mala impresión del general Izurieta porque siempre lo he tenido como un excelente oficial, un hombre muy inteligente, pero hay un principio muy antiguo en el Ejército. Si un comandante va a determinar una sanción para un subordinado, debe, por lo menos, tomarse 24 horas para pensarlo. Si él tomó la decisión en forma instantánea, no me habla muy bien de su actuar", relató y añadió que "por un llamado telefónico me enteré que tenía que presentarme al otro día de la misa que se realizó en Los Boldos". En ese sentido y -según explicó- la doctrina de acallar cualquier manifestación al interior del Ejército fue instaurada en la época del general Juan Emilio Cheyre e Izurieta la ha conservado. "El Ejército es muy claro. Cuando se sigue una línea y decide el alto mando por seguir un curso de acción, el resto tiene que acatar, eso es lo que sucede no más", dijo. Asimismo, aseveró que siempre tuvo claro que debía hablar en las exequias de su abuelo, pese a vestir el uniforme castrense, y reiteró que antes de su discurso, ya estudiaba la posibilidad de abandonar las filas. "Siempre tuve claro que debía hablar en los funerales de mi abuelo. Si quieres hablar lo vas a hacer, sin importar que ese día vistiera uniforme, que fue algo de la circunstancia. La verdad es que estaba viendo la posibilidad de dejar las filas del Ejército, en parte porque siento que justamente hay una política de acallar las expresiones como esa, acallar los sentimientos que existen (...) Yo soy soldado de corazón. Si no puedo decir lo que siento, no valgo nada. Da lo mismo la carrera, los grados, no significa absolutamente nada para mí. Lo que está adentro no me lo pueden quitar, lo de afuera sí", sostuvo. Consultado sobre los ataques que formuló a poderes del Estado, específicamente al Poder Judicial, al afirmar que hubo jueces "que buscaban más renombre que justicia", Pinochet Molina sostuvo que han surgido muchas especulaciones al respecto, pero dejó en claro que sus dichos apuntaban al juez español Baltazar Garzón y al ex magistrado Juan Guzmán. "Lo primero que puedo decir es que al que le caiga el poncho que se lo ponga (...) Pensaba principalmente en el juez Guzmán y el juez Garzón y los hechos posteriores me dan la razón cien por ciento. Efectivamente han sido jueces que han aparecido en forma reiterada en las noticias, han salido a hacer seminarios. De hecho, el juez Guzmán hasta se puso a reescribir la historia a su pinta", precisó. Finalmente, el ex capitán no descartó iniciar una carrera política, aunque señaló que nadie le ha hecho una propuesta concreta aún. "Todavía tengo que ver muchas cosas antes de tomar una decisión de esa naturaleza. En la medida que pueda entender cómo puedo aportar al bien común, la idea me atrae, sino no me interesa, no tengo nada que hacer", puntualizó. (ORBE) |
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