Ayacara, el poblado que baraja el gobierno para construir el nuevo Chaitén
La zona está en la mira de las autoridades desde que detectaron que las cenizas del volcán no llegaron hasta allá. Como el resto de la provincia, tiene problemas de conectividad, pero posee luz eléctrica, trabajo en la pesca y hasta un liceo ambiental creado por una fundación.
Aníbal Santander nació en abril de 1914 en Ayacara. Su parto fue asistido sólo por un par de tías, armadas con toallas limpias. En el pueblo no había más que 10 casas, un par de huellas por donde transitaban los bueyes y un embarcadero para que los pescadores capearan el mal tiempo. Actualmente, con unos 500 habitantes,Ayacara es el lugar más habitado de la península de Comau, ubicada 80 kilómetros al noroeste del evacuado Chaitén y que también alberga a las caletas de Poyo y Buil. Ayacara (que en voz huilliche significa "lugar bonito") es una de las alternativas que estudian las autoridades para fundar el nuevo Chaitén.
El domingo 11, el ministro en campaña José Goñi y las autoridades locales notaron que en Comau no había ni un gramo de cenizas. Así que la incluyeron en la misma lista de Futaleufú, Palena y Caleta Gonzalo, en un debate que aún no se ha ventilado sobre si será necesario refundar la capital de la provincia. "El traslado o regreso a Chaitén es algo que sólo el volcán puede responder", señaló Goñi.
OPINIONES DIVIDIDAS
La península, un paraíso de bosques de alerces milenarios, lagos, ríos y cascadas, cuenta con dos caletas de pescadores (la más antigua fue construida en los 70), varias escuelas básicas y el único liceo ambiental del país, iniciativa de la Fundación Ayacara.
Santander, el hombre más longevo de Ayacara, cuenta que los ayacareños son gente de esfuerzo, "porque a cada necesidad se deben recorrer por lo menos 30 kilómetros o esperar el lanchón que una vez por semana traía provisiones de Chaitén". De hecho, no hay un camino que los conecte con el pueblo inundado por cenizas y agua.
En la zona hay opiniones divididas sobre la eventual llegada de los chaiteninos. "Nadie puede vivir con la cuota (de pesca) de $ 300 mil que nos permite sacar la autoridad. A no ser que cuenten con cuotas autorizadas, los chaiteninos no tendrán de qué vivir aquí", dice Omar, antiguo pescador de Poyo. Recién hace cuatro años Ayacara tiene luz eléctrica, pero carece de agua potable y alcantarillado. De hecho, la gente tira una manguera a los esteros para abastecerse.
Gastón Gallardo, dueño de la única hostería del poblado, cree que el traslado de Chaitén será posible "si se instalan oficinas de servicios públicos, se incentiva la explotación del turismo y el mismo Estado interviene en la adquisición de terrenos".
Pablo Sándor, director ejecutivo de la Fundación Ayacara, se muestra escéptico. "No existe una infraestructura para soportar a toda la gente yendo hacia Ayacara. Hay problemas habitacionales y, además, ¿a qué se van a dedicar?", plantea. Para los escolares, la fundación ofreció el liceo, y están estudiando la posibilidad de acoger al resto de los evacuados en sus tierras.
Saludos
Rodrigo González Fernández
DIPLOMADO EN RSE DE LA ONU
www.Consultajuridicachile.blogspot.com
www.lobbyingchile.blogspot.com
www.el-observatorio-politico.blogspot.com
www.biocombustibles.blogspot.com
Renato Sánchez 3586
teléfono: 5839786
e-mail rogofe47@mi.cl
Santiago-Chile
No hay comentarios.:
Publicar un comentario