El caso de corrupción de la empresa chilena Salmones Colbun llevó a que el banco holandés Radobank reclamara la quiebra por una deuda impaga de dos préstamos que suman US$3,2 millones y puso una vez más la vergonzosa evidencia de malas prácticas en el ambiente de la acuicultura chilena, donde la FAO en febrero también pusiera un dedo indicador.
Los dueños de la empresa, José y Miguel Iracheta Cartes, para pedir el préstamo recurrieron a la falsificación de sentencias jurídicas y el pago a funcionarios públicos, según reveló la fiscalía del caso.
Un documento para la quiebra de Salmones Colbun fue firmado por el abogado Francisco Javier Conejeros en el mes de enero de 2014 explicando que la empresa debía cancelar 10 cuotas trimestrales finalizando en mayo de 2015, pero desde marzo de 2013 lleva cinco vencimientos impagos, informó el diario financiero Estrategia, según cita Visión Acuícola.
"Esta causa justamente tiene que ver con un sustento económico, es decir, el pago a funcionarios públicos, a abogados y el incremento del patrimonio de los imputados”, describió el fiscal jefe de Talca, Patricio Caroca, cuando el año pasado le negó la libertad bajo fianza a uno de los empresarios, según Red Maule.
La red oficial chilena retrató en mayo de 2013 las circunstancias en que estaba el caso de corrupción de funcionarios públicos cuando el empresario Miguel Iracheta Carte, dueño de Salmones Colbun se encontraba “en la unidad penal masculina de Talca formalizado junto a otras personas por diversos delitos relacionados con una investigación penal en torno a la falsificación de fallos judiciales”, según Red Maule el 3 de mayo de 2013.
Miguel Iracheta había pedido libertad bajo fianza después de 45 días en prisión ofreciendo depositar una suma de dinero, pero el fiscal jefe de Talca, Patricio Caroca, se la negó argumentando que con una de las sentencias falsas que se le descubrió, más una inscripción al Conservador de Bienes Raíces, solicitó el crédito bancario logrando grandes sumas de dinero, por lo que “a su entender resultaba improcedente cambiar la prisión preventiva por sumas de dinero”, agregó la red oficial.
Finalmente en agosto 2013, por la responsabilidad como persona natural en estos delitos de falsificación, cohecho, uso malicioso de instrumento público y usurpación de agua, se condenó a José y Miguel Iracheta Cartes, dueños de las empresas Salmones Colbun Limitada y Sociedad Agrícola Mecanizada Limitada a la pena de 5 años de prisión y una multa, informó Terra.
Los hermanos Iracheta Cartes además gestionaron inscribir derechos de agua a favor de sus empresas para poder vender el terreno agrícola pre cordillerano, llamado Fundo el Guanaco, a inversionistas extranjeros a un precio de 10 millones de dólares cuyo destino sería la construcción de centrales hidroeléctricas de paso.
La corte sentenció a sus empresas a la pérdida de beneficios fiscales por el plazo de tres años. ¿Volverá a operar esta firma después de este período?. En tanto se le cancelaron las inscripciones de derecho de aguas.
El caso de Radobank y Salmones Colbun se suma al deHSBC, que pidió en 2013 la quiebra de Pesca Chile, de la española Pescanova envuelta en acusaciones sobre sus prácticas financieras. Este mes le siguió la solicitud del Banco de Crédito e Inversiones en relación a Acuinova, cuyo 19,98% de la firma pertenece a Pescanova mientras que el 80,02% restante es de la matriz Pesca Chile, informó Faro del Vigo.
El sector acuícola chileno fue golpeado por el virus ISA en sus cultivos de salmón, Analistas sugieren que esto fue favorecido por malas prácticas sanitarias en el uso de insecticidas y antibióticos. "En los próximos meses, el sector bancario tiene previsto el cobro del 25% de la deuda global de la industria salmonera, que asciende a unos USD 1.800 millones", informó Fis, el 28 de febrero.
"Por ello, la banca solo apoyará a las compañías que cumplan con los vencimientos pactados, y no tiene previsto flexibilizar plazos o renegociar deuda salvo que las empresas presenten un plan de fusión o de mayor participación por parte de grandes empresas extranjeras, en especial de origen noruego", agregó Fis.
Las malas prácticas en la acuicultura chilena fueron también reveladas en el informe de la FAO. En él se nombran las irregularidades de varias empresas, citando como ejemplo a Marina Harvest y Mainstream. En el documento la FAO destacó el hecho de que los legisladores chilenos se encargaron de eliminar la cláusula usada por muchos países a nivel internacional, que obliga al retiro de licencias de operación a las empresas multadas.
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