'La comisión rectora del FROB (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria) ha acordado hoy suscribir capital del banco por un importe de hasta 1.000 millones de euros y otorgarle una línea de crédito de 2.000 millones de euros para asegurar su liquidez', dijo el Banco de España en un comunicado tras anunciar la intervención de la entidad y la sustitución de los administradores del banco por el estatal FROB.
El Banco de España explicó que a partir de la publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE), el FROB administrará el Banco de Valencia con el objetivo de estabilizarlo y así hacer posible una posterior enajenación a otra entidad mediante un proceso competitivo de venta.
La decisión de la comisión ejecutiva del Banco de España se produce 'después de haber constatado que (Banco de Valencia) no ha podido adoptar las medidas adecuadas para asegurar su viabilidad'.
Banco de Valencia anunció el pasado 7 de noviembre que contaba con la autorización de la junta de accionistas para poder aumentar capital por un importe nominal de hasta 60 millones. Entonces también reconoció que esta medida podría no ser suficiente para cubrir las necesidades de capital requeridas.
La entidad recordó entonces que la junta general de accionistas había aprobado el pasado 26 de marzo de 2011 delegar en el consejo poder aumentar capital en un importe máximo de hasta el 50 por ciento del capital, lo que a precios actuales de mercado supondría algo más de 182 millones de euros, muy lejos de los 3.000 millones de ayuda otorgados ahora por el FROB.
'El consejo de esta entidad ha manifestado hoy formalmente al Banco de España la imposibilidad de encontrar de inmediato una solución viable de futuro para la entidad y ha solicitado la sustitución de sus administradores por otros designados por el FROB', dijo el banco central sobre la petición del Banco de Valencia.
El Banco de España manifestó asimismo que los depositantes y acreedores de la entidad valenciana podían estar 'absolutamente tranquilos', 'ya que las decisiones adoptadas hoy garantizan que Banco de Valencia podrá seguir operando con normalidad y cumplirá con todas sus obligaciones frente a terceros'.
El regulador bancario recordó además que el peso del Banco de Valencia en el sistema bancario español es del 0,74 por del total de los activos.
La entidad valenciana está participada en un 27,3 por ciento por BFA, matriz de Bankia, producto de la fusión entre Caja Madrid, Bancaja y otras cinco entidades. El banco, que desde que se desataran las noticias de dificultades para captar liquidez por parte de su filial no ha realizado manifestaciones oficiales, se apresuró a asegurar en un comunicado al regulador que la intervención 'no tendrá un impacto significativo' en sus niveles de solvencia.
BFA cerró el primer semestre con un ratio de capital del 9,1 por ciento.
En otro comunicado al regulador, BFA dijo que Jose Luis Olivas Martínez presentó su dimisión como consejero de Bankia y consejero y vicepresidente de BFA.
PRIMERA INTERVENCIÓN DE BANCO ESPAÑOL EN ESTA CRISIS
La primera intervención de un banco comercial español desde que estallara la actual crisis se produce al día siguiente de la contundente victoria del Partido Popular (PP) en las elecciones generales del domingo.
Desde el estallido de la crisis financiera en 2007 se han intervenido también CCM, Cajasur y Caja de Ahorros del Mediterráneo, ésta última actualmente en proceso de subasta.
Además, se encuentran en proceso de nacionalización provisional otras tres cajas en un momento en el que los bancos españoles y, en especial las cajas, se han visto castigadas por el aumento de la morosidad como consecuencia del deterioro económico y de la depreciación de los activos inmobiliarios.
Por la tarde, la CNMV había suspendido cautelarmente la contratación de Banco de Valencia cuando sus acciones bajaban un 3,27 por ciento.
OBLIGACIÓN DE CUMPLIR CORE CAPITAL DEL 8%
El Banco de España elevó al 8 por ciento el ratio de capital principal que tenían que cumplir las entidades cotizadas y hasta el 10 por ciento para aquellas sin presencia significativa de inversores extranjeros.
No obstante, Banco de Valencia no tiene que cumplir con este ratio, ya que, al estar integrada en BFA, el ratio de solvencia aplicable es el de su matriz a nivel consolidado.
Sin embargo, el banco mediterráneo sí tiene que cumplir, tanto a nivel consolidado como individual, con el ratio de solvencia general de la normativa existente con anterioridad (el 8% de Basilea II).
Según los datos del primer semestre, el 'core capital' de Banco de Valencia se situaba por debajo de este nivel, en el 7,36 por ciento.
A 30 de junio el ratio de mora banco se situaba en el 6,99 por ciento, por encima del 6,33 por ciento de tres meses antes. El banco, que cuenta con 24.000 millones en activos, tenía créditos netos con la clientela de 18.300 millones.
Todos los observadores coinciden en que uno de los problemas más acuciantes que afronta la banca española - a diferencia de las entidades de otros países europeos, más preocupados por su presencia en deuda griega - sigue siendo su exposición a activos inmobiliarios.