Comienza análisis de perfil de funcionarios públicos
Cómo se prepara la instalación de la derecha en el gobierno
Convencidos de que ahora si llegarán a La Moneda, en el piñerismo no quieren dejar nada al azar. Es por ello que la plataforma programática, encabezada por la directora ejecutiva del Instituto Libertad, María Luisa Brahm, comenzó la última etapa de este largo camino al poder. El objetivo es conocer la situación del Estado y, por tanto, tener todo listo para "comenzar a gobernar desde el primer día".
Por Claudia Rivas Arenas
Con la entrega a la opinión pública del programa de gobierno de Sebastián Piñera culminó una etapa de trabajo. El viernes se inició otra. Denominada por los equipos programáticos del abanderado como "la instalación", apunta a la preparación para el proceso de hacerse cargo del gobierno, en la eventualidad que el empresario logre, por fin, llevar a la derecha a La Moneda. Esta fase se inició con una reunión a la que fueron convocados los institutos del sector y los grupos Tantauco, en el auditórium de Renovación Nacional. La idea consiste en estar preparados para afrontar el Organigrama de Administración del Estado en todo su amplio espectro.
Durante la hora de almuerzo, acompañados de un ligero refrigerio, los asistentes abordaron cuatro temas. Primero, la agenda legislativa. Esta se refiere a tres aspectos: aquellos proyectos que están siendo tramitados y que al 16 de noviembre sumaban 759. En los grupos Tantauco estiman improbable que esta cifra se reduzca en más de 50, de aquí al final del gobierno de Michelle Bachelet. Por lo que "hay que revisarlos, ver en qué etapa están y decidir qué vamos a hacer con ellos", dice una fuente del comando piñerista.
Otra pata de esta misma fase son los proyectos que deberían ingresar al Congreso "el mismo 11 de marzo", como la iniciativa que crea el Ministerio de Desarrollo Social, y que deben representar las prioridades que el presidenciable se ha planteado y ha comprometido con su electorado. Y en tercer lugar se revisaron aquellas leyes recientemente aprobadas, pero que le correspondería implementar a un gobierno de Piñera, es decir aquellas que están en "etapa post legislativa".
Diagnóstico de "recursos humanos"
El otro tema, tanto o más importante que el primero, es el de los recursos humanos. Demás está profundizar acerca de la trascendencia de este capítulo. Si bien a estas alturas existen "listas" con nombres de personas que podrían ser idóneas para ocupar cargos públicos de nivel intermedio, lo cierto es que los nombres sólo se confirmarán después de la segunda vuelta, cuando el triunfo esté asegurado. Por lo pronto, la idea central es "hacer un diagnóstico de lo que hay y en qué categoría. Lo propio se hizo con los consejos y los directorios de empresas del Estado. Es decir, cuántos funcionarios de planta, a contrata, a honorarios, de confianza, existen en el sector público. Para saber con qué se cuenta".
Y, aunque la fuente de los grupos Tantauco omite el resto por razones obvias -sobre todo cuando Piñera intenta atraer a los funcionarios públicos hacia su redil-, se busca tener claro de quiénes o cuántos es posible prescindir.
Después de todo, uno de los argumentos favoritos del dueño de Chilevisión para demostrar que la alternancia es necesaria, es que en estos años el Estado ha ido adquiriendo tanta "grasa" que no puede funcionar con eficiencia. Por lo que se ha comprometido en que si llega al gobierno "vamos a fortalecer el Estado, le vamos a fortalecer la musculatura al Estado para que llegue a la gente que requiere de la acción del Estado y, por supuesto, vamos a tratar de aliviar la grasa del Estado, que es la incompetencia, el despilfarro y la corrupción". En la misma línea, a principios de septiembre pasado, Andrés Allamand fue aún más allá, haciendo a los funcionarios públicos una advertencia que, seguro, ahora prefiere no recordar: "A partir de marzo tendrán que comenzar a buscar trabajo, porque dejarán sus cargos".
En tercer lugar, se analizará el estado de los proyectos de inversión en que está ocupado el Ejecutivo, en todas las áreas. También se catastraron los fondos y proyectos concursables. Y, por último, se hará lo propio con las políticas públicas más relevantes que se están ejecutando o aún en proyecto.
La responsabilidad de esta etapa, que termina el 17 de enero, está en manos de la directora ejecutiva del Instituto Libertad María Luisa Brahm, junto a sus pares de la Fundación Jaime Guzmán, Miguel Flores, y del Instituto Libertad y Desarrollo, Cristián Larroulet. En RN describen la labor de la abogada, integrante del Consejo de Alta Dirección Pública como el "cerebro" de los grupos Tantauco y dada su trayectoria, en el partido tienen la convicción de que "es capaz de proyectar la estructura que se va a necesitar para hacer un gobierno eficiente".
Guatita llena...
En la cita del viernes participaron 65 personas entre los tres directores de los institutos, los 37 coordinadores de los grupos Tantauco y profesionales de todos los organismos técnicos.
Convencidos como están en el piñerismo del triunfo de su candidato y evitando dejar nada al azar, a partir del 18 de enero está programada la segunda etapa de la instalación: "el ejercicio del poder". En este periodo, y hasta el 11 de marzo, los equipos de la derecha se abocarán al "traspaso del gobierno de manos de la Concertación a las nuestras", explica una fuente. En esas semanas se abocarán a la "revisión profunda de las condiciones en que recibiremos el Estado, para hacernos cargo del gobierno". La idea es que "no encontrarnos con sorpresas. Sino conocer hasta el mínimo detalle de la situación general del país", dice la misma fuente.
En esta última fase es donde a los diferentes cargos del organigrama de la administración del Estado se le pondrán los nombres. Así, comenzarán a aterrizarse las "listas" que circulan actualmente, con "potenciales interesados" en integrarse al servicio público. Aunque lo más probable, como lo ha dicho el propio Piñera, es que los ministerios queden en manos de figuras que integran los grupos Tantauco, habrá que abocarse a llenar vacantes en las subsecretarías, seremis, servicios y direcciones nacionales y sus correspondientes regionales, entre otros muchos cargos.