"Una mayor participación ciudadana, comunitaria y de la sociedad civil contribuirá a asegurar que los beneficios de la democracia sean compartidos por la sociedad en su conjunto". -Declaración de Mar del Plata (Cuarta Cumbre de las Américas, noviembre de 2005)
En todo el continente, los ciudadanos reclaman una mayor participación en las decisiones públicas que afectan sus vidas. Y los gobiernos están escuchando. Esta tendencia es especialmente evidente en la OEA, donde organizaciones de la sociedad civil han participado en el diálogo y la toma de decisiones sobre un creciente número de temas, desde la lucha contra la corrupción y el terrorismo hasta la promoción del desarrollo democrático y los derechos indígenas. La sociedad civil ha tenido un papel activo en la contribución de ideas y recomendaciones al proceso de Cumbres de las Américas, a reuniones ministeriales en el hemisferio y a la Asamblea Generalde la OEA.
En la actualidad, más de 170 organizaciones no gubernamentales (ONG) han sido acreditadas para participar en las actividades de la OEA. (Ver directrices para su participación).
A principios de mayo de 2006, la OEA auspició la Mesa Redonda con la Sociedad Civil: "Gobernabilidad y desarrollo en la sociedad del conocimiento", para escuchar ideas y propuestas relacionadas con el tema de la sesión anual de la Asamblea General, que tuvo lugar el mes siguiente, y con la agenda hemisférica. Los participantes casi 100 representantes de ONG y redes, provenientes de 22 países ofrecieron propuestas sobre temas como la promoción de la democracia, derechos humanos y el desarrollo económico y social. Además recomendaron medidas para avanzar las metas establecidas en la Declaración de Florida, adoptada por los cancilleres de la región en junio de 2005, y la Declaración y Plan de Acción de Mar del Plata, adoptados en la Cuarta Cumbre de las Américas.
El Secretario General de la OEA, José Miguel Insulza, expresó su deseo de abrir caminos para una mayor participación de las ONG en el quehacer de la OEA, sin perder de vista que se trata de instancias distintas. Aclaró que la OEA tiene sus facultades y atribuciones, así como "los límites que implica ser una organización de Estados, en donde están representados fundamentalmente los gobiernos de nuestros países". Dijo que tanto el organismo continental como las ONG pueden complementarse muy bien, y enfatizó que la OEA está dispuesta a recibir de la sociedad civil, todo aquello que a su juicio "sea necesario impulsar, corregir, mejorar, reforzar dentro del trabajo que realizamos".
Después de la mesa redonda, los participantes presentaron recomendaciones a los países miembros, durante una sesión especial de la Comisión Interamericana de Gestión de Cumbres y Participación de la Sociedad Civil, de la OEA. Estas propuestas, además, sirvieron de base para las ideas presentadas durante el Diálogo de Jefes de Delegación con la Sociedad Civil, que tuvo lugar el 4 de junio en Santo Domingo, República Dominicana, en el marco de la Asamblea General de la OEA. Este tipo de intercambio se ha incluido como una actividad regular de la sesión de la Asamblea General desde el año 2003.
A través de la OEA, representantes de la sociedad civil han elaborado recomendaciones para ser presentadas ante reuniones ministeriales sobre Educación, Trabajo, Cultura y Ciencia y Tecnología, entre otras. Además, representantes indígenas de todo el hemisferio se han reunido periódicamente con delegados gubernamentales para avanzar en el proyecto de Declaración Americana sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas. La Carta Democrática Interamericana fue elaborada tomando en cuenta opiniones ofrecidas por ONG e individuos durante el proceso de redacción. La sociedad civil también ha participado en seguimientos de tratados hemisféricos contra la corrupción y el terrorismo.
En la Cumbre Extraordinaria de las Américas, celebrada en 2004, los países miembros acordaron institucionalizar las reuniones con representantes de la sociedad civil, el sector privado y las instituciones académicas como parte del proceso de Cumbres de las Américas. Señalaron en la Declaración de Nuevo León: "Reconocemos el papel de la sociedad civil y su contribución a la buena gestión pública y reafirmamos la importancia de continuar consolidando nuevas asociaciones que permitan la vinculación constructiva entre gobiernos, organizaciones no gubernamentales, organismos internacionales y distintos sectores de la sociedad civil para que trabajen a favor del desarrollo y la democracia". En la víspera de la Cuarta Cumbre en Mar del Plata, representantes de la sociedad civil intercambiaron ideas con cancilleres y otros funcionarios de alto nivel de los Estados, sobre cómo avanzar el lema central de esa reunión: "Crear trabajo para enfrentar la pobreza y fortalecer la gobernabilidad democrática".
El papel del sector privado
Representantes del sector privado sostuvieron un encuentro similar con las delegaciones en Mar del Plata, e hicieron un llamado para el establecimiento de un vínculo formal entre el sector privado y la OEA. Este paso se tomó en abril de 2006, con la firma de un acuerdo de cooperación entre la OEA y el foro empresarial Sector Privado de las Américas, entidad sin fines de lucro. El acuerdo tiene el fin de promover el diálogo y estimular alianzas público-privadas que contribuyan a crear empleo, combatir la pobreza y fortalecer el desarrollo integral en la región.
Durante la ceremonia de firma, el Secretario General dijo que las políticas públicas deben nutrirse de la experiencia de los que hacen negocios y participan a diario en los mercados nacionales y regionales. "El sector empresarial puede hacer una gran contribución al mejoramiento de las políticas públicas e ir incluso en búsqueda de soluciones que nos ayuden a complementar la acción de los Estados y de organismos de desarrollo", afirmó Insulza. Añadió que el sector público tiene un rol fundamental en la formación de valores y en la creación de un ambiente social en que se puede prosperar pero, a la vez, tener justicia.
A principios de junio de 2006, en la víspera de la Asamblea General de la OEA, empresarios de alto nivel de todo el hemisferio se reunieron por dos días en Santo Domingo, con el fin de desarrollar ideas para fortalecer la competitividad, crear trabajo y mejorar el acceso a las tecnologías de información. El Foro del Sector Privado contó con la participación de los Presidentes de la República Dominicana, Leonel Fernández, y de Panamá, Martín Torrijos, así como de destacados representantes de organismos internacionales y de empresas privadas. Las recomendaciones elaboradas durante el foro -entre las cuales figuran iniciativas sobre la responsabilidad social empresarial, la lucha contra la corrupción y el fomento de la transparencia-, fueron presentadas a los países miembros de la OEA durante el Diálogo de Jefes de Delegación con Representantes del Sector Privado, el 4 de junio.
Última actualización: Junio de 2006
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