Por Claudia Betancourt M
Si hay alguien que tiene un gran sentido crítico y de humor, es Genaro Arriagada. Este militante DC, ex ministro del gobierno de Eduardo Freí, y quien fuera secretario ejecutivo de la Concertación de Partidos por la Democracia, y del Comando por el NO, hoy pone el acento en la necesidad de robustecer a los partidos políticos en este segundo ciclo de gobierno de la presidenta Michelle Bachelet. "Hay que tratar de fortalecer los partidos porque los gobiernos sin los partidos son un desastre. Y eso le pasó a Piñera y espero que no le pase a Michelle Bachelet". Para Arriagada, el riesgo esta allí, a la vuelta de la esquina porque "hay una creciente pérdida de disciplina en los partidos, mucha agenda personal", advierte. Y recalca: "la disputa de los dirigentes políticos por los espacio mediáticos es patética".
- ¿Cómo ha visto el proceso de instalación del gobierno? los problemas en las designaciones de los subsecretarios y gobernadores
-Es más anecdótico, mi impresión es que es el resultado de un fuerte aumento de la transparencia en Chile. Hoy vivimos montados en montañas de bancos de datos, hoy día todas la deudas y conexiones están en los portales, hace 10 años era imposible.
- A propósito de la transparencia, hay varios mecanismos para chequear nombres, sin embargo ese trabajo al parecer no se hizo...
-Aquí hay imprudencia de varios lados, pero la mayor imprudencia es lo que aceptan ser postulados creyendo que se pueden ocultar datos esenciales. Los partidos políticos tendrán que ser muy cautos respecto a quien recomiendan, y los gobiernos tendrán que crear gigantescos aparatos para chequear y rechequear todas las designaciones. Hoy en EE.UU. es normal, pero también tiene peligros,la transparencia total se parece bastante al infierno.
-Los problemas entre los partidos oficialistas ¿cuánto afecta el pronto cumplimiento del programa?
-Hay que distinguir,aquí ha habido un deterioro de los todos partidos desde hace 10 años, en el mundo entero y particularmente en Chile. Los grados de disciplina interna de los partidos son muy pocos, en consecuencia, aquí hay un gran desafío que es tratar de fortalecer a los partidos porque los gobiernos sin los partidos son un desastre, y eso le paso a Sebastián Piñera y espero que no le pase a Michelle Bachelet. Veo en el mundo político que hoy día predominan mucho las agendas personales, que es común la deslealtad con el propio partido y gobierno del que se forma parte, eso no es nuevo, pero es preocupante porque es creciente.
-Más allá, ¿qué piensa de que los partidos oficialistas exijan la salida de sus propias autoridades?
-Cualquier persona que ve este espectáculo tiene que concordar que aquí hay un crisis profunda de los partidos, de las conductas políticas, de la responsabilidad hacia los gobierno. Hay un desorden, pero seamos francos, esto no empezó el día cuando Michelle Bachelet nombró el gabinete, lo que hemos visto crecientemente es un pérdida de disciplina en los partidos, la disputa y los dirigentes políticos por los espacio mediáticos es patético.
-¿Cómo ve las relaciones en la Nueva Mayoría donde se deben entender sensibilidades tan distintas?
-El requisito fundamental de una buena política es armar una mayoría. Si uno no tiene mayoría, la verdad es que no debiera ser gobierno, eso es lo que dicen todos los regímenes parlamentarios del mundo que son los más eficientes.Construir una mayoría donde hay dos partidos es fácil, pero en Chile donde el sistema electoral permite la existencia de varios partidos, hay que llegar acuerdo con algunos que piensan distinto, eso me parece muy honorable y necesario.
- ¿No cree que tendrán algún grado de complicación al momento de debatir ciertas materias?
-No creo, porque todo tiene que ver con cuál es el objetivo que uno se propone. Si pongo mi objetivo como un absoluto, voy a terminar solo, pero si soy realista aunque estemos en desacuerdo, podemos avanzar, es absolutamente posible y en eso consiste ser gobierno.
- ¿Y no habrá discrepancias entre el PC y la DC?
-Es que si hay discrepancias muy profundas, las coaliciones se rompen y cuando sucedo eso, los gobiernos pasan a ser minoritarios o crean una nueva mayoría, aquí todos deben ser cautelosos y cuidar esto. No le pongamos a la política la exigencia de una unanimidad cuando no la hay ¿Cómo podría la DC, que es el partido más poderoso de la Nueva Mayoría gobernar sola? No podría, en consecuencia tiene que encontrarse con los comunistas.
Gobierno 2.0
Hay quienes califican al programa de gobierno de muy ambicioso ¿Sigue "pensando que es un beatería y el que no lo sigue será excomulgado?
- (Ríe) Me refería a una beatearía respecto a que no se pueden criticar a los movimientos sociales(...) ahora, me parece que un programa debe tener una dosis de ambigüedad. El lado bueno es que el gobierno de la presidenta Michelle Bachelet es 2.0, tienen una agenda con un grado de claridad que no la veíamos desde el tiempo de Patricio Aylwin.Hoy Bachelet tiene algo que hasta los niños repiten: ¿Qué quiere la señora Bachelet? Quiere reforma educacional, nueva Constitución, reforma tributaria, mayor igualdad y algunos le agregan mejor energía, eso es un gran activo, el punto es que hay que manejarlo con mucho cuidado porque puede generar una contra agenda.
-¿A qué se refiere?
-Cuando habla de reforma tributaria hay que hacerlo con cuidado, si no la derecha puede levantar la bandera que levantan en todos los países del mundo: reducciones de impuestos y eso es muy grave. Si la reforma educacional no se hace con cuidado la derecha puede levantar una bandera que es la libertad de enseñanza y el derecho de los padres de educar a sus hijos donde quieran. Esta agenda tan poderosa hay que manejarla con mucho cuidado para que no genere una polarización del país que lo divida, ese es el gran desafío que tiene la presidenta.
"El gobierno de Maduro es una dictadura"
-¿Qué le parece que mientras el gobierno de Bachelet respalda al gobierno de Nicolás Madura en Venezuela, organizaciones internacionales lo acusen de dictadura?
-Mí impresión, es que las elecciones las ganó Hugo Chávez honestamente, sin trampa, pero Nicolás Maduro esta al borde, está pasando la línea entre la democracia y dictadura. El gobierno de Nicolás Maduro es una dictadura y hay que darle con todo, en el sentido que Maduro debe ser condenado por todos los demócratas del continente. No puede ser que tengamos un doble estándar.
- ¿Respecto a qué?
-Lo que no concibo, es que una parte de la gente de la Nueva Mayoría no diga: Señor Maduro, no tiene derecho a cruzar la línea.
- Pero no me contestó respecto al apoyo de la mandataria a Maduro....
-Pero seamos francos, el retroceso de Maduro, en Chile hace un año no habría sido concebible. Esto es muy complicado, los gobiernos tienen políticas de Estado y a veces son duras de tragar. En la condena de Maduro los únicos tres países que lo condenaron en la OEA fueron EE.UU., Canadá y Panamá, y todos los demás miraron para el lado, lo que a mi juicio es muy lamentable. No le pongamos la lupa a la política de Bachelet, cuando seis meses antes se aplaudía el pragmatismo de Piñera, quien al encontrarse con Chávez y le gritó "Viva la diversidad". La política exterior chilena debe variar hacia una condena hacia Maduro.
"el neoliberalismo está en el basurero de la historia"
-¿Cómo ve la crisis de la Alianza?
-La derecha tiene algunos aspectos muy especiales, tiene una tendencia al canibalismo que es mayor a la nuestra, siendo que la nuestra es alta, pero la de ellos es insoportable. Tiene, además, una tendencia al fraccionalismo interno muy fuerte, y lo otro es que se han quedado sin ideas, porque la ideas que ellos tuvieron -y que fueron muy potentes- estaban asociados al predominio del libre mercado, de los equilibrios macroeconómicos, en que la injusticia social no existía, todas esas ideas están obsoletas. El neoliberalismo, para ser claros, están en el basurero de la historia, nadie lo esta invocando en ninguna parte del mundo. Entonces, la derecha debe redefinir un proyecto, y es por eso que siempre anda a trastabillones, no le gustan los gay, pero debe aceptar la Vida en Pareja, han tenido que tragarse muchos sapos y sus grandes iniciativas son nada más que políticas redistributivas de Estado, como el aumento del postnatal. En definitiva, la derecha tiene un déficit de ideas y los conservadores de la derecha que creen que pueden volver sacando del sepulcro al neoliberalismo y la moral, están enfermos de la cabeza.
- ¿No cree que puedan rearmarse?
-La derecha, a diferencia de nosotros, tiene un gran poder económico, se articula a través de clubes, de grandes organizaciones religiosas de carácter conservador, a través de gremios empresariales, entonces no hagamos cuentas alegres en la Nueva Mayoría respecto a que no es un factor de poder. A pesar de su desintegración y su fraccionamiento, la derecha es un factor de poder.