El ex ministro de Economía y Finanzas francés Dominique Strauss-Kahn tiene las mejores posibilidades de ser el nuevo director ejecutivo del FMI. Sarkozy había propuesto a Strauss-Kahn anoche en el círculo de los ministros de Finanzas de la zona del euro.
"Es el más adecuado para el cargo", dijo incluso Peer Steinbrück (socialdemócrata), el ministro de Finanzas alemán en Bruselas. El hasta ahora director ejecutivo del FMI, el español Rodrigo Rato (conservador), se retira del cargo en octubre por "motivos personales", se especula que para retornar a la política interna española.
Por su parte, Polonia retiró a su candidato, el ex jefe de Gobierno Marek Belka, luego de que su candidatura no hallara mucho eco entre los euroministros.
Un súper ministro
Strauss-Kahn, un reconocido economista hoy de 58 años, fue de 1997 a 1999 "súper ministro" de Economía y Finanzas de Francia, durante el gobierno del socialista Lionel Jospin. Luego de dos años en el cargo, se retiró debido a un "affaire" en relación con supuestos pagos ilegítimos de honorarios y suelos. Poco después, sin embargo, la justicia lo declaró no culpable en todos los casos.
Eventuales reservas alemanas con respecto a la candidatura de otro francés para un alto cargo internacional, como se había manifestado el lunes, no fueron confirmadas por Steinbrück. "No me parece bien operar con porcentajes nacionales", dijo Steinbrück.
También Alistair Darling, el ministro de Finanzas británico, se manifestó, como la mayoría de los Gobiernos de la UE, a favor de Strauss-Kahn. Darling calificó al francés de un "candidato con muchos créditos". No obstante, Gran Bretaña quiere salir también al encuentro de los países emergentes, que quieren obtener más influencia en el FMI.
"El Gobierno británico quiere esperar ahora, para ver si son propuestos candidatos de otros países miembros del FMI", dijo Darling. De acuerdo con las reglas del Fondo, pueden ser propuestos candidatos de cualquier país, si bien el cargo de director del FMI es ejercido tradicionalmente por un europeo, mientras que el director del Banco Mundial es tradicionalmente un estadounidense.
El apoyo de los ministros de Finanzas de la UE permite ahora a Strauss-Kahn tratar de lograr el apoyo de otros países para su candidatura y consultar a todos los demás miembros del FMI. El Gobierno de EE. UU. ya manifestó que está de acuerdo con la candidatura del francés.
Francia ocupa ya tres importantes cargos internacionales: Jean-Claude Trichet es presidente del Banco Central Europeo (BCE), Pascal Lamy se halla al frente de la Organización Mundial de Comercio (OMC) y Jean Lemierre dirige el Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo. No obstante, ello quiere decir mucho. Los tres han sido ya objetos de críticas de políticos franceses.
Strauss-Kahn: reformar el FMI
Strauss-Kahn se pronunció en sus primeras declaraciones ya a favor de una reforma del FMI que "proporcione a los países emergentes y en desarrollo el papel que éstos merecen". "Las tareas del fondo deben ser redefinidas, en vista de la globalización", agregó.
El ministro de Finanzas de Portugal, Fernando Teixeira dos Santos, dijo por su parte que en el debate acerca de la nueva distribución de participaciones en el FMI debía hablarse también acerca del ejercicio de la jefatura del Fondo en el futuro.
La doble dominancia de europeos y estadounidenses al frente del FMI y el Banco Mundial ya ha levantado efectivamente polémica con potencias emergentes como Brasil o China, que
se han manifestado en contra de esta fórmula excluyente de otras regiones del planeta. Porque
"es un legado de 1945 que no refleja el equilibrio actual de poderes en un mundo cada vez más globalizado".
La junta directiva del Fondo Monetario Internacional dijo el lunes que cualquier país podría nominar en el futuro a un candidato a ser el próximo jefe de la institución financiera, lo que abriría el puesto a la competencia mundial. Strauss-Kahn al frente del FMI y el estadounidense Robert Zoellnick como director ejecutivo del Banco Mundial pueden ser por lo tanto los últimos actores del Norte al frente de ambas influyentes instituciones.