JUAN PABLO TORO
"El Mercurio" Chile
Desde el colonial Palacio Torre Tagle en pleno Centro de Lima, el canciller Rafael Roncagliolo se muestra optimista sobre el curso de mejoría que espera adopten las relaciones entre Chile y el Perú en todos los ámbitos. Incluso en el tema de la demanda marítima de La Haya, Roncagliolo destaca la voluntad de ambos presidentes de acatar el fallo, cualquiera sea su contenido, lo que a juicio servirá para que los países asuman un camino conjunto de integración económica con miras al Pacífico.
Ubicado dentro de una izquierda tradicional moderada y representante de la gran variedad política del Gabinete de Humala, el canciller resalta la buena noticia de que los temores internacionales sobre el gobierno que integra se hayan disipado. Como prueba, señaló el hecho de que Standard and Poor's elevara la calificación de la deuda peruana. Porque, como explica, su gobierno tiene como meta principal continuar con el crecimiento económico, pero con inclusión social.
Antes de iniciar a una visita a Chile el viernes, para participar en el aniversario de la firma de la Carta Democrática de la OEA y reunirse con el canciller Alfredo Moreno, Roncagliolo habló ayer en Lima con "El Mercurio".
Como presidente electo, Ollanta Humala dijo que quería relaciones integrales con Chile. ¿Qué estrategia diplomática van a adoptar para cumplir este anhelo? A su juicio, ¿esto daría por finalizada la tesis de las cuerdas separadas?
Me parece muy importante destacar que en su primera salida al exterior como presidente electo, el presidente Humala haya visitado Chile, porque es una demostración de una voluntad de cooperación muy clara y precisa. Sobre esta base hay que mirar las relaciones como un conjunto integral, porque esto es como un vecindario o una familia, donde las relaciones son complejas en todos sus aspectos y se trata de desarrollar todos los aspectos positivos. Creo que la relación entre el Perú y Chile tiene un futuro muy importante. A partir de la firma del Acuerdo de Libre Comercio, y con la serie de actividades conjuntas que estamos realizando, esta puede ser aun más fructífera.
¿Se puede asumir, entonces, que, por ejemplo, se va a reeditar el mecanismo 2 + 2 (reuniones de cancilleres y ministros de Defensa) en un corto plazo?
Vamos despacio. Pronto vamos a tener una reunión a nivel de viceministros, pero hay una serie de comisiones mixtas que queremos actualizar, justamente con motivo de mi visita.
¿Tienen planes para dar un mayor impulso al ingreso de capitales peruanos a Chile, con miras a hacer más simétrica la relación comercial?
Espero que los empresarios peruanos miren todas las perspectivas que ofrece la economía chilena y que haya un mayor flujo de inversiones hacia allá. Y esa es una responsabilidad de los empresarios peruanos que queremos estimular.
El canciller Alfredo Moreno suele decir que Chile y el Perú se necesitan mutuamente para desarrollarse, dado que sus economías son complementarias y por el interesante mercado que abre la suma de sus poblaciones. ¿Comparte esta visión?
Comparto totalmente esa visión y creo que el Perú y Chile tenemos mucho que hacer por la integración de América Latina y para nuestra presencia conjunta en la Cuenca del Pacífico. No se olvide que el Perú tiene una cantidad de tratados de libre comercio con países como China, Japón, Corea del Sur, Singapur y Malasia, entonces ahí tenemos la posibilidad de desarrollar juntos una estrategia de apertura de mercados y de intensificación del comercio.
FALLO Y ESCENARIOS
¿Cree que es posible tener buenas relaciones en todos los ámbitos, pese a que sigue estando presente el tema de la demanda que interpuso el Perú en La Haya?
El tema de la demanda marítima interpuesta por el Perú está en este momento en manos de La Haya. Los países tenemos poco que hacer. Lo que nos corresponde es esperar la sentencia del tribunal. No tiene que seguir siendo un estorbo para mejorar las relaciones en todos sus aspectos. Más aun, creo que cualquiera que sea la sentencia de La Haya esto va a contribuir a mejorar las relaciones, en la medida en que disipa una discrepancia que todavía existe entre los dos países. Cualquiera que sea la sentencia, ambos presidentes han declarado enfáticamente la decisión de acatarla. Como países civilizados que somos resolvemos nuestras diferencias en un tribunal internacional y seguimos adelante.
¿A qué motivos obedeció el mantenimiento del equipo que ve el tema de la demanda en La Haya por parte del Perú?
Este es un tema de continuidad del Estado Peruano. Incluso hemos incorporado a la comisión consultiva al ex canciller Manuel Rodríguez Cuadros, quien es una de las autoridades peruanas en esta materia y cuya presencia es un símbolo de esa continuidad.
Pero en algunas ocasiones Rodríguez Cuadros ha hecho comentarios que en Chile han causado cierta preocupación, porque ha sido bastante drástico en sus lecturas sobre las relaciones bilaterales.
Puede ser…, pero en esto, yo creo que ambos países mantienen la idea de las políticas permanentes del Estado. Entiendo que también el Gobierno Chileno convoca a los ex cancilleres para asesorarse en estas materias. El Perú también lo ha hecho y trata de que el desarrollo de esta materia se base en un consenso nacional interno. Eso está detrás del hecho de que nosotros estemos buscando tener la mayor representatividad de posiciones dentro del Perú para llegar juntos a una posición.
A su juicio, ¿cuál es el mejor escenario de La Haya para Perú?
No me pida dar pronósticos sobre el fallo del tribunal. Nosotros vamos a acatar el fallo, cualquiera que sea, y por supuesto somos muy optimistas en la fuerza de nuestros argumentos.
¿Y cuál es el mejor para los dos países?
El mejor escenario es que haya una sentencia clara, definitiva y que sea aceptada por ambos países, como estoy seguro de que va a ocurrir.
¿Cree que Bolivia tiene un rol que jugar en este tema?
No, este es un problema bilateral entre el Perú y Chile. Otro problema distinto son las reivindicaciones que tiene Bolivia, que a su vez son un problema bilateral entre Chile y Bolivia.
¿Y en el caso de Ecuador? Por el tema de la carta náutica.
La situación limítrofe entre el Perú y Ecuador ha quedado claramente establecida, hemos suscrito este tratado y, por lo tanto, no tenemos conflictos con el Ecuador. No veo por qué podría ser parte interviniente en este proceso. El presidente de Ecuador [Rafael Correa] ha aclarado que no será parte interviniente.
Usted es sociólogo de profesión, así que le pregunto cuál es el sentir de la sociedad peruana a este respecto.
Yo creo que la sociedad peruana está muy unificada en esta materia. Usted no va a encontrar diferencias internas, lo cual es muy importante. Puede haber matices de interpretación histórica, pero en el cauce que se le ha dado a este proceso, creo que hay una gran identidad de todos los sectores. Evidentemente, estamos hablando de un tema muy sensitivo, y toda guerra deja cicatrices que hay que tener en cuenta. Pero el hecho de que estemos conduciendo esto como países civilizados a través de un tribunal, lo que va a permitir es contribuir a la cicatrización de estas heridas históricas que son inevitables.
TRABAJO A FUTURO
A la larga, ¿cómo se prepara el gobierno de Humala para relacionarse con Chile? Son cinco años de mandato por delante.
La sentencia de La Haya le tocará a los actuales gobiernos de ambos países, entonces el tema más trascendente de mi reunión con el canciller Moreno será cómo nos preparamos juntos para este escenario y por tanto hay que hacer todos los tejidos posibles intersectoriales no solo entre los gobiernos, también entre los empresarios, organizaciones sociales, académicos y periodistas. Todo esto hay que intensificarlo y multiplicarlo.
Humala vino como presidente electo a Chile. ¿Qué hay de una próxima visita en calidad de mandatario en funciones o una invitación al presidente Piñera al Perú?
No está en agenda, pero sí hay la voluntad. Estamos apenas hace un mes en el gobierno y estamos recién organizando las relaciones. Quiero reiterar que la relación del Perú con Chile, como dijo el canciller Moreno, es de dos vecinos que se necesitan mutuamente y que tienen un futuro común.
Sin embargo, discursos como el que dio el presidente Humala en Tacna, cuando dijo que nunca más en el Perú se volverá a vivir una ocupación extranjera, pueden revivir heridas…
La manera de cerrar las heridas es que no se vuelvan a repetir estos acontecimientos y es totalmente natural que el presidente de un país diga que espera que en el futuro nunca más el territorio sea cercenado. Es nuestro mínimo homenaje a la población tacneña y no tiene ninguna connotación de apreciación de las relaciones internacionales. No hay que tomarlo de otra manera.
NARCOTRÁFICO EN LA FRONTERA
Rafael Roncagliolo admite que en su gobierno existe preocupación por el tráfico de drogas a través de la frontera conjunta y, por lo tanto, considera urgente "fortalecer iniciativas que existen entre el Perú y Chile para tratar juntos este problema". En particular, se refiere a una comisión mixta de estupefacientes que se debe reunir antes de que termine el año en Santiago e instancias a nivel fronterizo que deben reunirse pronto. Además, menciona "acuerdos en ciernes" entre la policía del Perú y la de Investigaciones de Chile. Por último, invita a Chile a participar en la cumbre regional sobre narcotráfico, donde el Perú espera reunir a principios del próximo año a países productores, consumidores y de tránsito.
"NINGÚN BLOQUE IDEOLÓGICO"
Chile, el Perú, Colombia, México y Panamá vienen apostando por una integración comercial hacia el Pacífico, debido a los intereses comunes, y diferenciándose del bloque del ALBA, en el que predomina el factor político. ¿Está en los planes de su gobierno continuar con el llamado Arco del Pacífico?
Quisiera distinguir lo que son bloques ideológicos de lo que son procesos de integración. Nosotros no vamos a pertenecer a ningún bloque ideológico, por el contrario, vamos a estimular relaciones basadas en los intereses de los países. Nuestras relaciones con los países vecinos no se van a regir por las orientaciones que cada gobierno tenga. Al mismo tiempo, vamos a favorecer todos los espacios de integración que existan y este espacio de integración en su dimensión económica va a ser continuado por nuestro gobierno.
Por la influencia regional de Brasil y el giro dado por el presidente Humala hacia el modelo de Lula, se puede asumir que la gran apuesta del Perú es convertirse en la puerta de entrada y salida de Brasil en el Pacífico.
Por un lado, el presidente Humala ha dicho que el modelo brasileño de crecimiento económico con inclusión social, como modelo general, es muy interesante. Y el Perú quiere inscribirse en esa perspectiva. Eso no quiere decir que la política brasileña se pueda copiar en el Perú. Somos países bien distintos y cada país desarrolla sus procesos en función de sus características nacionales. Por el otro, la relación del Perú con Brasil es muy importante. Hay que superar esta vieja geopolítica de que el vecino de tu vecino era tu amigo, porque tu vecino era tu enemigo. Creo que no hay amigos y enemigos naturales, y postulamos a tener las mejores relaciones con todos los países. En este contexto, de superación de conceptos geopolíticos anacrónicos, privilegiamos la relación con Brasil. Como geográficamente estamos en el medio de América del Sur, es natural que si buscamos una incorporación conjunta al mundo los puentes entre el Atlántico y el Pacífico se vuelvan tan importantes para toda la región, no solo para Brasil y el Perú.
¿Tiene interés el Perú en darle más facilidades a Bolivia sobre el uso del puerto de Ilo, más allá del empleo para fines comerciales y de eventuales naves de la Armada boliviana, como se acordó durante el gobierno de Alan García? Esto a propósito de su visita a Santa Cruz.
Tenemos un protocolo de 1992 y uno ampliatorio que está en revisión del Congreso peruano, y la idea básica es fortalecer las distintas posibilidades que tiene Bolivia, como país sin litoral, de acceder al Pacífico, todas las que quiera usar. En ese sentido Ilo es una posibilidad, que no solo sirve a los dos países y al sur peruano, sino a toda la región. Por ejemplo, la idea del presidente [Evo] Morales de un ferrocarril que vaya de Puerto Suárez a Ilo, no solo va a servir a los países sino a toda región.
El anterior presidente Alan García decía que su propósito era equiparar e incluso superar a la economía chilena. ¿Su gobierno cree en mantener esa meta?
La emulación siempre es positiva. Pero lo que quisiéramos es que Chile, el Perú y toda América Latina tengan un lugar más importante en la economía mundial.
COMUNIDAD EN CHILE
"Como un factor de acercamiento entre los dos países", así describe Rafael Roncagliolo la forma como ve su gobierno a la comunidad peruana en Chile (unas 130 mil personas, de las cuales 70% pertenecen a la población económicamente activa y 80% envía remesas). También admite que la administración Humala "valora muchísimo las medidas de regularización tomadas por el Gobierno Chileno" hacia estos inmigrantes, que hoy acceden a beneficios en salud y educación. A su juicio, este trato ha incidido en mejorar las relaciones bilaterales.