La RSC, también llamada Responsabilidad Social de la Empresa, está encaminada a que justamente una empresa tenga un valor agregado en cuanto a ética por lo tanto se involucra voluntariamente en mejorar lo social, lo económico y lo medioambiental.
Consiste en dar un paso más allá respecto a centrarse solo en los beneficios económicos de cara a los accionistas. Los objetivos de la RSC se amplían a la sostenibilidad global; beneficios sí, pero con ética y cierta moralidad, como por ejemplo el respeto al medio ambiente en la fase de producción, las mejoras sociales para sus trabajadores o incluso los contratos o subcontratos con empresas que no utilizan mano de obra infantil. Estos son los actos que van más allá del mero hecho de cumplir estrictamente las normas legales sobre medioambiente o derechos laborales.
Antecedentes
El nacimiento de esta nueva imagen de empresa con RSC surge a finales del siglo XIX, con el cooperativismo y el asociacionismo, movimientos en los que asociaciones de consumidores y empresas productoras se unen con el fin de intercambiar información para la obtención de productos afines a las necesidades de consumidor. La base de este tipo de asociación es su potencial ético, con unas normas de relación basadas en la equidad entre las partes, responsabilidad en su implicación, democracia en la toma de decisiones, solidaridad en el momento de solucionar problemas, la ayuda mutua y el esfuerzo para alcanzar los objetivos previstos. Y todo ello bajo un lecho de transparencia y honestidad. Con estos principios sociales de democracia, autoayuda, apoyo a la comunidad y justicia distributiva se pretende conciliar la eficacia empresarial.
Elconcepto actual de RSC surge a mediados del siglo XX, en Estados Unidos, en los años 50 y 60. En la actualidad el máximo exponente de la RSC es la economía social: conseguir Empresas Socialmente Responsables.
Principios rectores de la RSC
A la base ética anterior del movimiento cooperativista se le han añadido otros valores que están muy institucionalizados internacionalmente. Por ejemplo la OIT (Organización Internacional del Trabajo) afirma que la RSC o RSE es de carácter voluntario, que la empresa se compromete ante la sociedad y afirma los principios por los que se rige en sus procedimientos internos, abarcando el mundo laboral y productivo, así como extendiendo estos principios a sus relaciones externas y demás actores, como pudiera ser la compra de materia primas.
Actualmente los principios que una empresa con RSC se compromete a cumplir son:
1. Servir a la sociedad con productos útiles y en condiciones justas.
2. Crear riqueza de la manera más eficaz.
3. Respetar los derechos humanos en el mundo laboral, cumpliendo con las normativas legales como las condiciones de trabajo, la prevención de riesgos laborales, y el desarrollo laboral de sus profesionales.
4. Procurar la continuidad de la empresa con un crecimiento razonable.
5. Respetar el medioambiente cumpliendo con la normativa medioambiental en la eliminación de residuos, invirtiendo en formación sobre el uso de energías y la supresión de la contaminación.
6. Cumplir rigurosamente lo estipulado en sus contratos y compromisos.
7. Respetar la equidad en la distribución de la riqueza.
Controversias planteadas
Hoy en día la empresa comprometida con RSC está en el debate de muchos expertos. Kenneth E. Goodpaster, Titular de la cátedra Koch Dotat de Ética de Negocio de la Universidad de St. Thomas (Minneapolis, EE.UU.), y John B. Mathews Jr., de la Businessman/Retired Elementary School Principal, entre otros, han formulado el siguiente dilema: las empresas multinacionales son tan poderosas que es peligroso que se inmiscuyan en temas sociales y políticos, pero también lo es que solamente se dediquen a maximizar sus ganancias.
En España, la RSC surge a mediados de los 90, a través de la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones (INVERCO) con el fin de poder incluir empresas españolas en las carteras de determinados fondos de inversión y de otros productos éticos financieros. Una manera de incluir en el nuevo mercado ético nombres de empresas españolas para mantener su nivel competitivo. Aquí se presenta otro dilema de la RSC, pues es muy fina la línea que separa ser una empresa realmente responsable socialmente o ser la empresa que desea mantener su nivel de competitividad comercial en el mercado.
Pero en líneas generales, la internacionalización de los mercados encaminan a las empresas a dar un paso más allá del mero hecho de conseguir beneficios a corto plazo para sus accionistas, y actualmente, los empresarios están cada vez más convencidos de que el éxito comercial y los beneficios duraderos se obtienen con un comportamiento orientado por el mercado, pero de forma ética y responsable.
La RSC hoy
Poco a poco la empresa socialmente responsable, va creando su propio entorno internacional, así que la conciencia de contribuir con un desarrollo sostenible en cuanto al desarrollo económico y aumentar la competitividad empresarial ha dado lugar a que se elaboren y publiquen informes con las actuaciones responsables dentro del marco laboral, social y medioambiental que se han llevado a cabo en el año. Estos informes reciben el nombre de Memorias de Sostenibilidad y siguen los criterios de GRI (Global Reporting Iniciative), el estándar internacional para la elaboración de memorias de RSC.
En los criterios de GRI existen protocolos a seguir en el ámbito económico, del medio ambiente, de los derechos humanos, de las prácticas laborales y de trabajo digno, de la responsabilidad sobre productos, y sobre la sociedad. Así mismo, GRI facilita los criterios de redacción y contenido de las memorias anuales sobre RSC, de manera que las empresas del grupo estén en equidad y todas ellas cumplan los mismos requisitos y tengan el mismo nivel de exigencia para realizar comparaciones fiables. Uno de los problemas que se presentan para José Luis Blasco, director de servicios de RSC de KPMG (una de las cuatro firmas más importantes del mundo en servicios profesionales: servicios de auditoría, fiscales y de asesoramiento legal, financiero y de negocio), es que no es evidente distinguir a las empresas que tienen un compromiso sincero en RSC de las que no lo tienen si solo se analizan sus informes.
En nuestro país, un tercio de las empresas que cotizan en bolsa han publicado sus informes GRI. En mayo de 2008, se inició la entrega de los Premios GRI y ya entonces se contaban como finalistas 8 empresas españolas. En lo que llevamos de año, existen informes de unas 49 empresas españolas, de un total de 443 internacionales y 280 europeas. Entre éstas se encuentran: Bancaja, Banco Español de Crédito, Deloitte Spain, Gas Natural SDG, Grupo Antena 3, Iberdrola, La Caixa, Red Eléctrica de España, Repsol YPF, Sol Meliá, etc…
Son muchos los problemas a saldar en el nuevo enfoque empresarial que avanza hacia el futuro, con una visión de empresa que va algo más lejos de los simples estudios de mercado, añadiéndose la ética y la responsabilidad. Es el inicio de una nueva era socialmente responsable que con una visión de justicia social, democracia y equidad, es muy probable que encuentre la manera de corregir los problemas que se planteen, haciendo uso de la cooperación y la implicación. La intención es caminar hacia un mundo global mejor.