| | Laura Trevelyan BBC, en Naciones Unidas |
EE.UU. ha rechazado dos veces unirse al Consejo de Derechos Humanos de la ONU |
El nuevo Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas (HRC) acaba de cumplir su primer aniversario. El consejo reemplazó a la antigua y desacreditada Comisión de Derechos Humanos, la cual se había convertido en un hazmerreír porque era liderada por los países con el peor récord de derechos humanos en el mundo.
Sin embargo, hay críticos que aseguran que el consejo no ha mejorado respecto a su predecesor, y ahora en Estados Unidos, el congreso busca recortar sus fondos.
La Comisión de Derechos Humanos recibió un golpe devastador cuando en 2005, el entonces Secretario General de la ONU, Kofi Annan, la calificó como "una sombra en la reputación del sistema de la ONU en su totalidad".
Annan estaba reflejando la opinión de los activistas de derechos humanos de todo el mundo que consideraban que una comisión como ésa no debería estar integrada por países como Sudán y Zimbabwe.
Era demasiado embarazoso para la ONU ver a los gobiernos de Jartum y Harare escudados por su participación en el principal organismo de derechos humanos de la ONU.
"Faro de los derechos humanos"
Así que la Comisión fue abolida y reemplazada por el Consejo de Derechos Humanos (HRC, por sus siglas en inglés)), con sede en Ginebra.
"Creo que sería loco decir que éste no fue un año decepcionante", afirmó Steve Crawshaw, de la organización internacional humanitaria Human Rights Watch.
El mundo en desarrollo no domina en el Consejo de Seguridad |
"El HRC debería haber sido, si tú quieres, un faro de los derechos humanos. "Realmente esperábamos que el nuevo consejo avanzara de forma radical. Y, para ser honestos, ha fracasado".
El gobierno de Estados Unidos votó en contra de la creación del HRC, diciendo que los países con los peores récords estarían todavía en posibilidad de ser elegidos como miembros del organismo.
"Realmente es una gran decepción", asegura Kristen Silverberg, asistente del secretario de Estado de Estados Unidos, responsable de la política estadounidense en Naciones Unidas.
"Este es un consejo que dedicó ocho acciones para criticar a Israel, antes de levantar un dedo para ayudar a gente de otras partes del mundo, como la sufrida gente de Birmania, Corea del Norte o Zimbabwe".
Intermitencia
El consejo aprobó, durante su primer año, nueve resoluciones que critican el récord de los derechos humanos de Israel, pero sólo emitió tres sobre la situación en Darfur.
Israel señala que el organismo, constituido por 47 miembros, está dominado por países que integran la Organización de la Conferencia Islámica (OIC, por sus siglas en inglés).
"Tenemos un problema de números", dice Itzhak Levanon, embajador israelí en el consejo.
"La OIC, que son los países musulmanes, incluyendo los países árabes, tienen la mayoría en los números
"Lo que esto significa es que ellos pueden llamar cuando sea para una sesión especial. Y segundo, pueden poner cualquier resolución en la mesa sobre cualquier elemento. "Así que, básicamente, esos países sólo estaban entablando resoluciones contra Israel, mientras desestimaban lo que ocurría en otras latitudes".
Dos ámbitos, dos situaciones
En el Consejo de Seguridad de la ONU, Israel cuenta con Estados Unidos, un aliado incondicional que ha usado su veto en el Consejo de Seguridad de la organización para impedir que se aprueben resoluciones en su contra.
En el HRC, dominado por países en desarrollo y sin la presencia de EE.UU., sucede exactamente lo opuesto.
Munir Akram, embajador de Pakistán ante la ONU, afirma que fue legítimo para el consejo dedicar mucho de su primer año examinando a Israel.
"Bueno, el hecho es que hubo desarrollos serios en el terreno, a los cuales el consejo respondió", señala. "El consejo es un organismo político y, por supuesto, es quizás el único espacio político en la ONU donde no hay veto, como en el Consejo de Seguridad".
Pero Silverberg dice que Israel sí es discutido por el Consejo de Seguridad.
"Israel es objeto de más atención y escrutinio dentro del Consejo de Seguridad que ningún otro país. Y eso se puede decir no sólo del Consejo de Seguridad, también de la Asamblea General", afirma.
"Verdad complicada"
Organizaciones de derechos humanos mostraron inquietud cuando Egipto fue elegido, un país criticado por torturar a oponentes políticos.
Así que, ¿cómo es posible que países con mal récord de derechos humanos sean elegidos en un organismo que se supone defiende esos mismos derechos?
Steve Crawshaw, de Human Rights Watch, explica: "Esta es una de esas verdades complicadas en cualquier tipo de diplomacia multilateral, en otras palabras, cualquier tipo de diplomacia que involucra a todos los gobiernos del mundo". "La ONU misma es un organismo así, y el HRC de la ONU está creado por elecciones en las que participan todos los gobiernos de la ONU.
"Ahí dentro, para ser honesto, tienes muchos gobiernos que no tienen una agenda natural de derechos humanos, y otros a los que sencillamente no les importa el récord que tenga Bielorrusia o Cuba...".
En su última acción, antes del receso de verano, el consejo decidió suspender el escrutinio de los derechos humanos en Cuba y en Bielorrusia, pero continuó examinando a Israel.
Sin embargo, Munir Akram, afirma que la estructura entera de la ONU es política. El Consejo de Seguridad está dominado por Rusia, China, Francia. Estados Unidos y el Reino Unido (el así llamado P5), quienes pueden vetar decisiones y por tanto el mundo en desarrollo busca ejercer poder en donde puede.
"Aquellos países que sienten que no tienen una voz en el Consejo de Seguridad, que sienten que sus posiciones no pueden más que esbozarse en una situación de dominio del P5... buscarán otras avenidas para expresarse", dijo.
Sean cuales sean los problemas con el consejo, incluso sus críticos aducen que es mejor tenerlo que no.
A pesar de la retórica de idealismo, tal parece que el consejo es sólo otra arena política en la que las divisiones política quedan al desnudo.