IVONNE TORO A.
Un símbolo que refleja el mandato con que llega el ex senador José Antonio Viera-Gallo al Gobierno es que su debut como ministro secretario general de la Presidencia será una reunión con el ex abanderado de derecha Sebastián Piñera. El inversionista tenía una cita agendada con la ex ministra Paulina Veloso para presentarle su proyecto de modernización de la Contraloría y Viera-Gallo -que se declaró un convencido de que lo mejor para el país es promover acuerdos con la Alianza- mantuvo la bilateral con el líder opositor, iniciando así la interlocución que RN-UDI le atribuyó al socialista renovado desde el momento en que la Presidenta Michelle Bachelet lo anunció como uno de sus refuerzos.
La ausencia de una figura en el Gobierno que diera garantías al conglomerado opositor para negociar fue una crítica frecuente por parte de la Alianza, hasta que Viera-Gallo fue nombrado en reemplazo de Veloso y tanto en Renovación como en el gremialismo destacaron que con su llegada la puerta a la convergencia en el Parlamento de nuevo está abierta.
En la tarde de ayer, el timonel de la UDI, Hernán Larraín, se contactó con Viera-Gallo para felicitarlo por designación en la Segpres y de paso iniciar las conversaciones para la selección del Contralor, una materia en la que no hubo avances con Veloso, ya que la presentación del abogado Pablo Ruiz-Tagle fracasó. Él tiene las condiciones humanas y personales para ser un buen interlocutor con la oposición. Lo que necesitamos es que venga empoderado, que tenga la capacidad, las atribuciones, las facultades, para poder avanzar y llegar a acuerdos y no estar consultando, ironizando, y al final no concluyendo lo que se conversa, expresó el senador, en una crítica hacia la labor que cumplió Veloso, con quien la derecha no logró entenderse, al punto que el debate sobre el titular de la Contraloría quedó en manos del presidente del Senado, Eduardo Frei.
La remoción de Veloso, considerada una figura del socialismo más ortodoxo, sin vínculos con la Alianza y refractaria a hacer concesiones, fue un anhelo de la oposición desde que asumió en marzo de 2006. El otro deseo de la Alianza es que el PS que la reemplaza tenga atribuciones para alcanzar esos acuerdos que son necesarios y que no se pudieron concretar durante el primer año de Gobierno, es decir, que Viera-Gallo represente plenamente a la Presidenta ante la oposición, al punto que su palabra tenga la validez de un compromiso gubernamental.
Larraín, que además valoró la honestidad de Bachelet de admitir los errores en el diseño e implementación del Transantiago, concedió que en la elección de Viera-Gallo hay una señal positiva que se condice con otros buenos gestos que durante este mes ha tenido La Moneda: Pedimos que dejara sin efecto el nombramiento de Chiledeportes y así ocurrió. Pedimos cambiar el equipo de Transportes y así ocurrió.
Según el dirigente de la UDI queda una tarea pendiente que es compartida por Viera-Gallo y la Jefa de Estado: que el Ejecutivo escuche a la oposición, oiga sus planteamientos, trabaje junto a ella no solamente en el ámbito legislativo y que imponga orden en la Concertación, porque con este caos no hay ningún Gobierno que vaya a funcionar. Para Larraín, la ausencia de disciplina y lealtad en el bloque oficialista es lo que ha debilitado la gestión Bachelet.
En torno a esta materia, el propio Viera-Gallo manifestó que los parlamentarios oficialistas fueron elegidos para respaldar al Gobierno de Michelle Bachelet y que por tanto es esperable que sean muy leales con el mandato que la ciudadanía les entregó.
Sobre sus nexos con la oposición, enfatizó que privilegiará la política de los acuerdos. Necesitamos que todos nos unamos por el bien de Chile, todas las encuestas indican que el Gobierno debe escuchar más a la oposición y la oposición debe colaborar más con el Gobierno, postuló.
Amigo mío
Y Viera-Gallo parte al menos en buen pie con esta labor. Su desempeño en el Congreso es valorado por la Concertación y la derecha, a lo que suma un historial plagado de nexos apropiados para sus funciones. Es cuñado del vicepresidente gremialista Andrés Chadwick y amigo del presidente de RN, Carlos Larraín, desde hace décadas. No me puede parecer mejor, porque es amigo mío desde los 16 años. Le encuentro aptitudes, tiene una visión amplia, es inteligente, tiene experiencia, tiene muchas cualidades. Va a reforzar la muñeca política del Gobierno, enfatizó el concejal por Las Condes al retratar por qué la Alianza tiene un cartel de bienvenido para un socialista.LN
Próximo a Insulza, pero también allendista
Tan amplia es la red de amistades del nuevo ministro secretario general de la Presidencia, José Antonio Viera-Gallo, que en la derecha tiene vínculos de décadas con miembros de las mesas de RN y la UDI, y en la Concertación es considerado como parte de la vieja guardia de la multipartidaria. Pero hay una relación que ha levantado dudas respecto de cómo enfrentará el titular de Segpres la solapada contienda por la candidatura presidencial 2009: su nexo con el ex ministro del Interior y actual secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, que aparece en los sondeos como la figura mejor evaluada de la Concertación.
Yo soy muy cercano a Insulza, por cierto. Somos compadres y amigos de toda una vida, pero no estoy aquí para servir a Insulza, estoy aquí para servir al país, precisó ayer el ex senador después de firmar su ingreso al gabinete. De este modo, Viera-Gallo rechazó que su papel en el Ejecutivo consista en ser el rostro de Insulza en La Moneda. Incluso agregó que además de próximo a Insulza también podría ser considerado allendista, ya que fue el primer subsecretario de Justicia del régimen de la Unidad Popular. Insulza y Viera-Gallo tienen un derrotero similar: la DC en los 60, el Mapu en los 70 y desde los 80 el ala renovada del PS.
Y para evitar cualquier suspicacia al respecto, tuvo un gesto hacia la carta de la DC, Soledad Alvear. Detalló que cuenta con la anuencia de todos los timoneles de los partidos oficialistas para cumplir su rol, en especial de quien fue rival de la Presidenta Michelle Bachelet y que es considerada la candidata falangista para los próximos comicios. Todos me han manifestado su beneplácito y su disposición a colaborar, especialmente Soledad Alvear, explicó el ministro (incluso en la interna de la coalición entre 2004 y 2005 se aseguraba que tanto Viera-Gallo como Insulza creían más en la potencia político-electoral de Alvear que de Bachelet).
En una señal de que no está en campaña por ningún candidato y que pretende cumplir a cabalidad su función de sacar adelante los proyectos del Gobierno en el Congreso -su prioridad es desbloquear la nominación del Contralor y conseguir apoyo para la reforma provisional-, la primera actividad oficial de Viera-Gallo hoy será recibir al ex abanderado de la derecha Sebastián Piñera, porque uno de los sellos que pretende imponer el ex legislador es el retorno de la democracia de los acuerdos. En este sentido, manifestó que es partidario de lograr grandes convergencias con la Alianza, a la vez que les recordó a los parlamentarios oficialistas díscolos que todos ellos hicieron campaña con la Presidenta Michelle Bachelet y que por ello le deben lealtad en la tramitación de los proyectos de ley.