La razón de las bestias
Hugo Chávez a generado una profundización del conflicto entre Colombia y Ecuador llevándolo al límite de provocar una absurda guerra y comprometiendo en esa aventura a toda la región. Sin la intromisión del socio del narcoterrorismo colombiano las cosas no habrían traspasado la vía diplomática, pero el desquiciado dictador impuso con su paranoia la unión de Rafael Correa al redoble de tambores y la rotura de relaciones diplomáticas.
En una escalada de la tensión no se aceptaron las disculpas del gobierno colombiano ni sus explicaciones sobre los hechos, solo se acometió contra su presidente por combatir en lucha armada a la mas sanguinaria organización terrorista que conoció Latino América, como lo ha venido haciendo efectivamente durante su mandato.
Nadie procuró acompañar la lucha contra el terrorismo que se viene librando en Colombia y que también beneficiaría a países vecinos, solo se condenó al Señor Uribe con el calificativo de terrorista, anteponiendo como excusa la violación territorial sufrida por Ecuador, caratulada como un hecho de guerra por parte de Rafael Correa y su homólogo Hugo Chávez.
Gobiernos amigos del venezolano en vez de poner paños fríos al conflicto echaron mas leña a la hoguera, demostrando que la paz no es política de estado. Argentina, Bolivia, Nicaragua y Francia se alinearon detrás de Ecuador y Venezuela en la reunión realizada en la OEA, otros gobiernos como Brasil no fueron tan extremistas pero también pusieron su granito de arena, mas suave fueron las intervenciones de Chile, Uruguay y Paraguay, mientras otros países solo incorporaron deseos de una solución pacífica, el único apoyo total para Colombia lo hizo el representante norteamericano. No pudiéndose llegar a un entendimiento se decretó un receso hasta el día siguiente.
Las denuncias expuestas por Colombia que sindican directamente a Hugo Chávez, de acuerdo a registros hallados en computadoras pertenecientes al terrorista Raúl Reyes de una gravedad excepcional que dejaban al descubierto una íntima relación de éste con las FARC por medio de negociados y financiamientos mutuos, no parecieron ser suficientes para condenar al perverso tirano bolivariano. Tampoco fueron tomados en cuenta documentos que implicaban a Rafael Correa, quien a cambio de favores permitió por lo menos hace un año se instalaran campamentos terroristas en territorio ecuatoriano con el fin de adoctrinar a poblaciones fronterizas.
Apañar, esconder y financiar a los narcoterroristas como lo venía haciendo Chávez primero y luego Correa, dentro de un maquiavélico plan que se pagaba por medio de la entrega de algunos rehenes como para humanizar al monstruo mostrándolo como alguien comprometido con la paz, merece repudio y castigo, algo que no se pudo observar en la reunión de la organización hemisférica.
Los que se dicen líderes populares de la región, "protegidos por el voto popular y democrático" (Cristina Kirchner dixit), no parecieron darse por aludidos ante estas denuncias que los involucran y como es el caso del matrimonio Kirchner quienes siguen viento en popa con su relación amistosa con el tirano venezolano, a quien lejos de cuestionar le siguen brindando un apoyo incondicional.
"No existe justificación para violar la soberanía de Ecuador", es lo único que se escucha en Argentina, cada vez mas lejos del gobierno y pueblo colombiano por el que dice la Presidente encontrarse dispuesta a renovar esfuerzos para lograr acuerdos humanitarios que permitan recuperar a los rehenes secuestrados por las FARC.
Esta Primer Mandataria que dice representar a todos los argentinos, no parece haber notado que estos se encuentran preocupados por los clamores de guerra lanzados por su amigo bolivariano y consternados por la liviandad con que esta Señora asume estos acontecimientos viendo como a pesar del conflicto viajará alegremente a reunirse con su colega venezolano en Caracas.
Como si todo esto no fuera poco, los argentinos debieron soportar una vergüenza mas, la carta abierta de esas Madres de Plaza de Mayo, defensoras de extraños derechos humanos, dirigida al Presidente Alvaro Uribe, criticándolo por defender a su país de un asesino serial, algo que estas señoras inveteradamente han hecho con quienes en Argentina combatieron a las bandas terroristas que por tres décadas sembraron la muerte en nuestro país.
Autor: Susana Sechi
Directora de La Historia Paralela
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Rodrigo González Fernández
DIPLOMADO EN RSE DE LA ONU
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