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miércoles, agosto 19, 2009

Campaña de humor en Alemania

Campaña de humor en Alemania

 

También en Alemania hay políticos con humor que quieren llegar a la cancillería, sólo que o son figuras salidas de la fantasía de un cómico o de un amante de la sátira. En todo caso, le ponen color a la disputa política.

 

Mientras la campaña política apenas se deja sentir, una campaña humorística paralela causa sensación en Alemania. Los potenciales sufragantes se están riendo a carcajadas de las proposiciones y ocurrencias de Horst Schlämmer, el candidato a la cancillería por el Partido de la Diversión.

 

Y las perspectivas para Schlämmer no son tan malas. Al fin y al cabo, una de cada cinco personas en Alemania votaría, en efecto, por él. Votaría, porque la verdad es que Horst Schlämmer no es un político real sino un humorista en traje de político.

 

Todos los medios al servicio de la "política humorística"

 

"Si observo a algunos políticos de la vida real y lo que dicen frente a las cámaras, tengo que decir que ellos son más bien la caricatura del político, más que el mismo Horst Schlämmer", escribe el internauta "Schade 77" en un foro.

 

Tanto en foros de Internet como en las barras de las cervecerías alemanas, tanto viejos como jóvenes hablan de la campaña "política" que adelanta el Partido de Horst Schlämmer (HSP). El problema es que este partido es salido de la fantasía humorística de Hape Kerkeling, uno de los humoristas más famosos de hoy en Alemania.

 

Aún así, mucho están creyendo que el HSP es un partido político de verdad. Eso tiene mucho que ver con la vasta campaña publicitaria que Horst Schlämmer ha desatado a través de todos los medios, los convencionales y nuevos, como Twitter y Facebook. Diarios, portales virtuales, estaciones de radio y canales de televisión reportan sobre la campaña ficticia del humorista.

 

"Isch kandidiere", la película antes del show

 

Pero toda la fiebre mediática desatada ha tenido un objetivo concreto: promocionar la película "Isch kandidiere" o "Yo me lanzo de candidato", de Hape Kerkeling como Horst Schlämmer, en el papel protagónico que se presenta por estos días en los cinemas alemanes. Ahora sería interesante ver si la cinta a ser tan exitosa como ha resultado ser la campaña para publicitarlo.

 

En el film, Horst Schlämmer recorre las calles en busca de jefes de partidos y de Gobierno que enreda en conversaciones para desvelar sus lados flacos. Schlämmer empero, no es comparable con Sacha Baron Cohen quien ha aparecido como Brüno y Borat en producciones fílmicas recientes. Schlämmer aparece muy inofensivo al lado los personajes de Baron Cohen. 

 

Aún así, Schlämmer es un fenómeno bienvenido en la escena humorística… y política de la Alemania de hoy. Claudius Seidl, ensayista del diario Frankfurter Allgemeinen Sonntagszeitung, le agradece incluso a Hape Kerkeling o más bien a su personaje Horst Schlämmer animar la actual campaña política llena de políticos aburridos. "Horst Schlämmer, el candidato salido de la ficción parece haber venido a nosotros para mostrarnos cuan irreales aparecen los demás candidatos productos de diseñadores de imagen y que no saben interpretar las preocupaciones ni las dudas de la gente que piensa", dice Seidl.

 

También la sátira tiene electores

 

Martin Sonneborn es, por su parte, menos Martin Sonneborn, jefe de Bildunterschrift: Großansicht des Bildes mit der Bildunterschrift:  Martin Sonneborn, jefe de "Die Partei" reclama ser admitido como partido serio. conocido que Horst Schlämmer, pero más incisivo que el primero. Sonneborn fue jefe de redacción de la revista de sátira Titanic y hoy es jefe de "El Partido". Éste sí real y quiere participar en las elecciones parlamentarias del próximo 27 de septiembre. Sólo que la Dirección de Elecciones Parlamentarias no aprobó su inscripción. Aún así, Sonneborn no se rinde y sigue luchando por llegar a la cancillería. No en vano en las elecciones de Hamburgo obtuvo el 0,4% de votos.

 

"Nosotros somos el partido que quiere llegar al poder", es el lema del partido del satírico Martion Sonneborn. "La diferencia con el  partido de Schlämmer es que ese partido no es real y tiene un candidato muy feo", dice Sonneborn a DW-WORLD. "El Partido", en cambio, cuenta con una candidata muy bella a la cabeza, muy de acuerdo con otro de los lemas del partido satírico: "Sí votamos por una mujer, pero que sea bonita". Algo que se debe entender como un flechazo contra la actual canciller, Angela Merkel, candidata de los partidos conservadores alemanes.

 

 

Autor: Andreas Main / JOV

 

Editora: Claudia Herrera Pahl

Fuente:DW
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Rodrigo González Fernández
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