OPINION: Los errores de Al Gore

Los errores de Al Gore

Un grupo de científicos alega que la película de Al Gore, "Una verdad incómoda", tiene al menos 35 errores serios, de los cuales 9 fueron incluidos en una corrección que manda el gobierno del Reino Unido a todas sus escuelas

En un documento titulado "Treinta y cinco verdades incómodas – Los errores de la película de Al Gore", el ex asesor de Margaret Thatcher, Christopher Monckton of Brenchley asegura que pueden refutarse científicamente por lo menos 35 de las tesis que ha difundido en el mundo el exvicepresidente Gore con respecto al calentamiento global. Los primeros nueve "errores" fueron previamente identificados por la Suprema Corte de Londres, según reporta Monckton en su escrito. Ésta obligó al gobierno inglés a mandar a cada escuela secundaria –pues en todas se mostró la película de Gore- una "nota aclaratoria" para explicar la posición científica "oficial" sobre esos nueve puntos, o de lo contrario las autoridades habrían contravenido un acta del parlamento que prohibe el adoctrinamiento político de los estudiantes. INCREMENTO EN EL MAR Según la película de Al Gore, al derretirse las capas de hielo de Groenlandia y la Antártida Occidental, el nivel de mar se incrementará en más de 6 metros, causando devastación en gran parte del mundo. Sin embargo, los cálculos científicos indican que el deshielo de estas capas, en los próximos 100 años, apenas incrementará en unos 6 centímetros –no metros- el nivel medio del mar.   Además, Monckton presenta estadísticas que indican que el nivel del mar en el mundo ha venido creciendo gradualmente, y con el mismo ritmo, desde 1850 (con un incremento de aproximadamente 1.7 centímetros cada 10 años). La aparición del uso de hidrocarburos a mediados del siglo XX no parece haber afectado esta tendencia. ISLAS HUNDIÉNDOSE Otros de los "errores" en que habría incurrido Gore incluyen los alegatos de que, por efecto del deshielo, varias islas del Pacífico se están "hundiendo", y que además, las corrientes cálidas en los océanos se están aniquilando, con lo que Europa entera podría congelarse. Monckton asegura que el problema de las islas del Pacífico proviene de que han sido dinamitados sus bancos de coral. Con respecto a las corrientes cálidas de agua, si bien han sufrido variaciones consideradas "cíclicas" en las últimas décadas, Monckton refiere que hay un consenso científico universal de que "el calentamiento global no puede aniquilar estas corrientes". ¡CO2, LA CAUSA? La principal tesis de Gore, y de toda la agenda política del "cambio climático" en el mundo, es la de que las emisiones por combustibles fósiles son causantes del calentamiento global. Esta idea está sustentada en el hallazgo de que durante las eras glaciares los cambios dramáticos en la temperatura vienen acompañados de cambios, también dramáticos, en la concentración de bióxido de carbono. Sin embargo, según explica Christopher Monckton of Brenchley, la literatura científica es también unánime en concluir que la tesis que expone Gore es exactamente al revés; esto es, que fueron los radicales cambios en las temperaturas durante las glaciaciones las que provocaron grandes incrementos en la concentración de bióxido de carbono. Este "error" de Al Gore, crucial para desmoronar la teoría del "cambio climático producido por la contaminación humana", fue uno más que acreditó la Suprema Corte de Inglaterra. El documento de Monckton también refuta la teoría de que el Monte Kilimanjaro se está derritiendo por el calentamiento global, indicando que este fenómeno ocurre por lo menos desde hace 125 años. Sobre el lago Chad, en África, que se está secando, la historia refiere que también estuvo seco en los años 5,500 a.C., 1000 a.C., y 100 a.C. HURACÁNES Y TIFONES Gore asegura que el Huracán Katrina, que devastó Nueva Orleans, fue otro efecto del calentamiento global, así como el incremento en el número de huracanes, tifones y tornados. Sin embargo, los registros indican que los huracanes no se han incrementado en 50 años, que los tifones han bajado en los últimos 30 años, y que los tornados grandes también han disminuido; sólo los tornados chicos se han incrementado en los registros, probablemente porque hay mejores sistemas para detectarlos. Monckton menciona otros 27 "errores" en la película de Gore, que incluyen el relacionar al calentamiento global con fenómenos como la muerte de osos polares, el blanqueamiento de bancos de corales, la desaparición de varios glaciares, y la desertificación de diversas regiones en el mundo.   La contaminación "no es la causa" Siempre que se le pregunta sobre el tema, el mexicano Mario Molina, premio Nobel de química, ha respondido que "no está comprobado, ni científicamente aceptado, que la contaminación sea la causa del llamado calentamiento global" de nuestro planeta. Sin embargo, pareciera que el mundo ya considera incuestionable esta teoría impulsada en especial por algunos organismos, que a decir de sus detractores, obedecen a ciertas agendas políticas. John McLean, en su artículo "Falacias del Calentamiento Global", asegura que no hay ni siquiera un consenso científico mundial con respecto a que sea un hecho el que el clima del planeta se esté calentando. De entrada, explica, los registros verdaderamente precisos de la temperatura apenas tienen 30 años de existir, y las cifras que se utilizan para medir las temperaturas promedios no siempre representan la realidad de todos los rincones medidos, ni la de todo el planeta, por lo que no cumplen con un rigor científico. Pero además, McLean reporta que tampoco hay un consenso científico mundial con respecto a que sea la contaminación la causante de los cambios climáticos, o de haberlo, del llamado calentamiento global. Ni siquiera está aceptado que sean los humanos los causantes de dicho fenómeno. La organización que sostiene esa teoría, tan masificada hoy en día, es la IPCC (Intergovernmental Panel on Climate Change), la cual, dice McLean, no realiza investigación propia y se basa sólo en su propia selección de reportes, además de ser fuertemente influenciada por algunos gobiernos. McLean argumenta que, pese a los alegatos del IPCC, para la comunidad científica mundial no existe ninguna prueba concluyente de la relación entre el fenómeno climático y el incremento de las emisiones de bióxido de carbono. Ambos índices podrían estarse incrementando sin que necesariamente uno cause al otro. De hecho, mientras que las emisiones de combustión de carbón se han ido incrementando permanentemente, la llamada temperatura global, aunque ha subido en promedio, ha tenido altas y bajas en los últimos 20 años (ver gráfica anexa). Las bajas de temperatura no podrían explicarse con la teoría del IPCC, debido a que la emisión de gases contaminantes no se ha interrumpido en ningún momento. Para algunos científicos, hay más evidencias de que ciertos cambios en el sol pueden estar contribuyendo a los cambios en la temperatura del Ártico; para otros, estos cambios climáticos han sido recurrentes en la historia.

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Saludos
Rodrigo González Fernández
Diplomado en RSE de la ONU
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