| 10. Marzo´08 – Los principales partidos políticos -PSOE, PP e IU-, conscientes de la importancia del mundo rural en la vertebración de la economía y de los votos que allí pueden cosechar, reconocen en sus programas su relevancia más allá del capítulo agrario y lo incluyen en todas sus políticas de forma transversal.
Coinciden en un aspecto fundamental: ampliar los derechos y servicios de la población que vive en el medio rural para evitar la despoblación y equipararlos a los que disfrutan en el medio urbano, así como reconocer el papel de la mujer, tradicionalmente relegada a un segundo plano, en la diversificación de la economía rural.
Las tres formaciones apuestan por hacer más accesibles los datos del Observatorio de Precios a la sociedad y ofrecer una mayor transparencia en la fijación de los precios y los márgenes comerciales.
El mundo rural está muy presente en el programa electoral del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), que dedica un capítulo especial a su futuro y desarrolla, además, aspectos específicos de diversas políticas sociales, económicas y de vivienda para el medio rural.
El Partido Popular (PP) da forma en su programa electoral a su compromiso con el campo español mediante la creación de una Secretaria de Estado de Desarrollo Rural que hará que las necesidades de la población rural estén presentes en todas las políticas del ejecutivo para igualarle en derechos y servicios.
Apoyar políticas de desarrollo rural, cuyo eje sea la actividad agraria y la mejora de las condiciones de vida de los habitantes del medio rural, es una de las líneas de Izquierda Unida (IU), que aboga por políticas agrarias de género para hacer visible el trabajo de las mujeres que supone la aplicación definitiva de la ley de Igualdad.
En cuanto al agua, uno de los grandes caballos de batalla, el PSOE ampliará el horizonte de finalización del Plan de Choque de modernización de regadíos, para que se pueda alcanzar un ahorro de 2.200 hectómetros cúbicos anuales y completará el Plan de Modernización de Regadíos, mediante la aplicación rigurosa de la Directiva Marco del Agua.
El PP propone recuperar la planificación hidrológica y el carácter nacional del recurso, rompiendo la actual tendencia a su "territorialización", y resolver los déficit hídricos en España.
IU, con una apuesta por regadíos sociales, señala que los nuevos usos del agua deben estar al servicio del medio rural y no crear expectativas de nuevos usos, ni de usuarios del agua.
Los transgénicos, un tema no exento de polémica en agricultura, no se mencionan en el programa popular, sobre los que el PSOE, sin posicionarse en contra, asegura que elaborará una nueva Ley del Régimen Jurídico de los Organismos Genéticamente Modificados, cultivo rechazado por IU hasta que no se dispongan de estudios que garanticen la no-contaminación de la agricultura convencional y ecológica.
La agricultura ecológica, que tampoco está en las prioridades del PP, será potenciada tanto por PSOE, que quiere que el 10% del territorio nacional esté bajo este sistema productivo en 2012, como por IU que aboga por potenciar el mercado interno, local y los canales comerciales cortos.
Con respecto a la pesca, PP y PSOE coinciden en la necesidad de mejorar la comercialización y el etiquetado de los productos pesqueros, así como en mejorar la condiciones sociales de los trabajadores del mar y en promover una pesca responsable, para el mantenimiento de los recursos pesqueros.
En pesca, IU critica que cada año se agotan nuevas pesquerías, como la anchoa, el atún rojo o la cigala y exhorta a que no se ignoren los consejos científicos para avanzar hacia una gestión pesquera sostenible. |
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