TU NO ESTAS SOLO EN ESTE MUNDO si te gustado un artículo, compártelo, envialo a las redes sociales, Twitter, Facebook LA POLITICA ES DE LA ESENCIA DE LA DEMOCRACIA

viernes, octubre 12, 2007

Premio al juez Cerda

Posteado por El Mercurio a las Octubre 12, 2007

Saludos
Rodrigo González Fernández
DIPLOMADO EN RSE DE LA ONU
www.Consultajuridicachile.blogspot.com
www.lobbyingchile.blogspot.com
www.el-observatorio-politico.blogspot.com
Renato Sánchez 3586
teléfono: 5839786
e-mail rogofe47@mi.cl
Santiago-Chile
 
soliciten nuestros cursos de capacitación   y asesorías a nivel internacional

Columna de Juan Pablo Cárdenas, UNIVERSIDAD DE CHILE

Columna de Juan Pablo Cárdenas

AMISTAD EJEMPLAR

Mano de obra barata, débil legislación laboral, bajos impuestos a las ganancias de las empresas, poderosas reservas monetarias, discreción en el gasto público y pésima distribución del ingreso. Aunque es justo reconocer que todavía en México el Estado invierte en educación, salud pública y cultura mucho más que en Chile.


Por Juan Pablo Cárdenas
Publicado el 11 Oct 2007

REVOLUCION OF HOPE  se llama el libro del ex presidente mexicano Vicente Fox  escrito con otro coautor que, seguramente, le ayudó mucho en discurrir las ideas y atinar en su redacción. Una autobiografía que ganará el mérito por proclamar al mundo que George Bush es el hombre más petulante que haya conocido el vaquero de Guanajuato en su vida política. En este texto de reciente aparición, Fox se prodiga en elogios hacia el ex presidente Ricardo Lagos, a quien tilda de ser su "amigo particular y aliado". Por cierto, todo el mundo es libre de cultivar las amistades que quiera y, de ser cierta su aseveración, seguramente que nuestro ex Mandatario le va a corresponder con alguna declaración o escrito.

Curioso resulta, sin embargo, la asociación que hace el mexicano del proceso político y económico de su país con el nuestro, como con los respectivos regímenes de Costa Rica y Colombia. Se trata, declara Fox, de "democracias sociales de libre mercado con un capitalismo con rostro humano", al paso que fustiga a Venezuela y excluye de su comentario a otras naciones de la Región. Dificulto que el propio Ricardo Lagos esté tan de acuerdo con lo que asegura Fox, aunque similitudes efectivamente existen entre Chile y México.

En primer lugar, el país del norte y el del sur viven estos años las enormes bondades del buen precio de nuestros productos esenciales: el petróleo y el cobre, respectivamente. A lo anterior, hay que sumar que Chile y México fueron de los primeros países en acordar un Tratado de Libre Comercio, al mismo tiempo de adelantársele a todas las naciones latinoamericanas en pactar otro amplio convenio con los Estados Unidos. De lo anterior, se deriva que ambos son amigos dilectos del estado más poderoso, abiertos sin remilgos al mercado y a los capitales foráneos tal como lo exigen los gobiernos estadounidenses. Por supuesto que de esta asociación resulta, también, que ambos países pertenezcan al círculo del bien definido por la Casa Blanca. En cuanto y hasta cuando se comporten como aliados de la potencia imperial al momento de comprar armas, invadir países y vulnerar la legislación internacional.

Por cierto que las similitudes se expresan, además, en nuestras respectivas realidades internas, lo que explica que Chile y México sean reconocidos por Wall Street como tierra de oportunidad para la inversión extranjera y rigor con los compromisos adquiridos con las empresas del Primer Mundo. Es decir, mano de obra barata, débil legislación laboral, bajos impuestos a las ganancias de las empresas, poderosas reservas monetarias, discreción en el gasto público y pésima distribución del ingreso. Aunque es justo reconocer que todavía en México el Estado invierte en educación, salud pública y cultura mucho más que en Chile, donde se mantiene el IVA a los libros y los liceos y universidades estatales tienen que mendigar los "fondart" y otros escuálidos derroteros fiscales para no ser arrollados tan violentamente por las entidades que lucran con el derecho esencial a la educación. Sin embargo, es posible que las ventajas mexicanas se acorten próximamente con el reconocimiento de Fox de que Chile es un verdadero ejemplo para su país.

Posiblemente sea en el deseo expresado por Vicente Fox de que ambas naciones nos igualemos cada día más que Chile le retribuye elevando sus niveles de corrupción e injerencia del narcotráfico en nuestra política,  en lo cual el gobierno de su amigo Lagos habría hecho un gran aporte si se consideran los procesos que se ventilan en nuestros tribunales. Al mismo tiempo que nuestras respectivas "democracias" se igualan en ilegitimidad, cuando el sucesor de Fox resulta de un descarado fraude electoral y los representantes políticos chilenos de un sistema electoral vergonzosamente acotado y con cada vez menos votantes y esperanza ciudadana.

Saludos
Rodrigo González Fernández
DIPLOMADO EN RSE DE LA ONU
www.Consultajuridicachile.blogspot.com
www.lobbyingchile.blogspot.com
www.el-observatorio-politico.blogspot.com
Renato Sánchez 3586
teléfono: 5839786
e-mail rogofe47@mi.cl
Santiago-Chile
 
soliciten nuestros cursos de capacitación   y asesorías  INVERSION EXTRANJERA Y LOBBY a nivel internacional

El nuevo libro de Naomi Klein: La doctrina del shock

El nuevo libro de Naomi Klein: La doctrina del shock PDF Imprimir Correo
Escrito por LaVaca   
11-10-2007 a las 12:06:48

La canadiense Naomi Klein ha editado su flamante libro, La doctrina del shock (el auge del capitalismo de desastre), que todavía no existe en castellano. The shock doctrine (su título original) surge de la relación entre las políticas de shock neoliberal de las últimas décadas, comparadas con los verdaderos shocks eléctricos aplicados a prisioneros y enfermos como modo de doblegarlos, domesticarlos, e imprimir sobre ellos una nueva personalidad. Con las sociedades está ocurriendo lo mismo, dice Klein, quien sostiene que el principal recurso contra este modo de dominación es la información. Aquí, el impresionante video que acompaña la salida del libro.

Naomi Klein

"Este libro es un desafío a la afirmación central y más valorada en la historia oficial – que el triunfo del capitalismo desregulado nació de la libertad, y que los mercados libres irrestrictos van mano en mano con la democracia. En su lugar, mostraré que esta forma fundamentalista de capitalismo ha sido consistentemente traída a la vida por las formas más brutales de coerción, infligidas al cuerpo político colectivo así como a innumerables cuerpos individuales."
Así comienza la canadiense Naomi Klein su nuevo libro, The shock doctrine (La doctrina del shock). Klein es la autora de No logo, Vallas y ventanas (y más recientemente, del prólogo de la edición norteamericana de Sin Patrón, de lavaca).
Esta nueva obra plantea una recorrida por su hipótesis de que las sociedades modernas son sometidas a verdaderos electroshocks (y cabe agregar que el sistema de torturas aplicado en la Argentina por el régimen militar es tal vez la expresión más cabal al respecto) que permiten ablandarlas y someterlas a la aplicación de políticas neoliberales sin anestesia, tal cual lo pregonó el economista Milton Friedman y tal como lo aplicaron desde dictaduras latinoamericanas hasta gobiernos como el de Margaret Thatche en Inglaterra, o los de los Estados Unidos en general. La idea es que una matanza, un desastre natural, o cualquier hecho conmocionante abre paso a la posibilidad que Friedman pone como condición para que se aplique la política del shock a una sociedad domesticada por el miedo o el terror.
Así, pueden formar parte de esta doctrina tanto los golpes de Estado latinoamericanos, como la guerra de Malvinas, la matanza Tiananmen en China, los atentados a las Torres Gemelas o los desastres naturales que cada vez parecen más cotidianos: herramienta de shock para justificar luego políticas económicas de privatización, depredación, concentración de la economía en pocas manos, desempleo, empobrecimiento y hambre a costa del sometimiento de sociedades enteras.
Naomi Klein empieza por investigar los experimentos de la Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos (CIA), con la tortura por electroshock como forma de "desesquematización" de los detenidos o internados. Luego comienza la descripción sobre cómo esos tormentos, ese shock eléctrico, es comparable a las políticas de un capitalismo que de otro modo no podría generar la dosis suficiente de atontamiento, miedo y parálisis que le permite doblegar a grandes sectores de las sociedades modernas.

Pero el mensaje del libro, y del documental que presentamos aquí, no queda sólo en la denuncia y la indignación. Naomi plantea que el arma de resistencia frente a este modelo de cosas es la información. Saber lo que ocurre y cómo, para poder generar pensamiento y acción que abran espacio a la vida.
Aquí publicamos además la entrevista que en Democracy Now le hiciera a Naomi Klein la periodista Amy Goodman, un modo de ir adentrándose en el contenido de La doctrina del shock.

La entrevista

Amy Goodman: Me alegra que esté con nosotros, Naomi. ¿Por qué no comienza por hablar sobre lo que considera exactamente que es la doctrina del choque?

Naomi Klein: Bueno, la doctrina del choque, como todas las doctrinas, es una filosofía de poder. Es una filosofía sobre cómo lograr sus propios objetivos políticos y económicos. Y es una filosofía que sostiene que la mejor manera, la mejor oportunidad, para imponer ideas radicales de libre-mercado es en el período subsiguiente después de un gran choque. Ahora bien, ese choque podría ser una catástrofe económica. Podría ser un desastre natural. Podría ser un ataque terrorista. Podría ser una guerra. Pero la idea, como acabáis de ver en la película, es que esas crisis, esos desastres, esos choques ablandan a sociedades enteras. Las dislocan. La gente se desorienta. Y se abre una ventana, exactamente como la ventana en la cámara de interrogatorio. Y en esa ventana, se puede introducir lo que los economistas llaman la "terapia de choque económico." Es una especie de extrema cirugía de países enteros. Es todo de una vez. No es, sabe, una reforma por aquí, otra reforma por allá, sino el tipo de cambio radical que vimos en Rusia en los años noventa, que Paul Bremer trató de imponer en Iraq después de la invasión. De modo que eso es la doctrina del choque.

Y no significa que se pretenda que los derechistas en una época contemporánea sean los únicos que han explotado alguna vez una crisis, porque esta idea de explotar una crisis no es única en cuanto a esta ideología en particular. Los fascistas los han hecho. Los comunistas estatales lo han hecho. Pero se trata de un intento de comprender mejor la ideología con la que vivimos, la ideología dominante de nuestros días, que es la economía de mercado desinhibida.
AG: Explique quién es Milton Friedman, al que arrostra enérgicamente en este libro.

NK: Bueno, arrostro a Milton Friedman porque es el símbolo de la historia que estoy tratando de cuestionar. Milton Friedman murió el año pasado. Murió en 2006. Y cuando murió, vimos como lo describieron en tributos muy pomposos como si fuera probablemente el intelectual más importante del período de la posguerra, no sólo el economista más importante, sino el intelectual más importante. Y considero que se puede construir un argumento contundente en ese sentido. Fue consejero de Thatcher, de Nixon, de Reagan, del actual gobierno de Bush. Dio clases a Donald Rumsfeld en los primeros días de su carrera. Asesoró a Pinochet en los años setenta. También asesoró al Partido Comunista de China en el período clave de reforma a fines de los años ochenta. Así que tuvo una influencia enorme. Y hablé el otro día con alguien quien lo describió como el Karl Marx del capitalismo. Y creo que no es una mala descripción, aunque estoy segura de que a Marx no le habría gustado demasiado. Pero fue realmente un popularizador de estas ideas.

Tenía una visión de la sociedad, en la que el único papel aceptable para el Estado es implementar contratos y proteger fronteras. Todo lo demás debe ser abandonado por completo al mercado, sea la educación, los parques nacionales, la oficina de correos, todo lo que podría producir un beneficio. Y realmente vio, supongo, que las compras – la compra y la venta – constituyen la forma más elevada de democracia, la forma más elevada de la libertad. Y su libro más conocido fue "Capitalism and Freedom" [Capitalismo y libertad].

De modo que cuando murió el año pasado, a todos nos sirvieron un recuento de la versión oficial de cómo esas ideas radicales de libre-mercado llegaron a dominar el mundo, cómo barrieron por la antigua Unión Soviética, Latinoamérica, África, cómo esas ideas triunfaron durante los últimos treinta y cinco años. Y me impresionó tanto, porque yo estaba escribiendo este libro, que nunca habíamos oído hablar de violencia, y nunca oímos hablar de crisis, y nunca oímos hablar de choques. Quiero decir, la historia oficial es que estas ideas triunfaron porque deseábamos que así fuera, que el Muro de Berlín cayera, y la gente exigió tener sus Big Macs junto con su democracia. Y la historia oficial del auge de esta ideología pasa de Margaret Thatcher diciendo: "No hay alternativa," a Francis Fukuyama diciendo: "La historia ha terminado. El capitalismo y la libertad van mano en mano."

Y por lo tanto, lo que trato de hacer con este libro es contar la misma historia, las coyunturas cruciales en las que esta ideología ha dado un salto adelante, pero reinserto la violencia, reinserto los choques, y digo que existe una relación entre las masacres, entre las crisis, entre los grandes choques y golpes duros contra países y la capacidad de imponer políticas que son realmente rechazadas por la vasta mayoría de la gente de este planeta.

A. G: Naomi, usted habla de Milton Friedman. Expándalo a la "Escuela de Chicago."

N. K: Correcto. De modo que la influencia de Milton Friedman proviene de su papel como el popularizador real de lo que es conocido como la "Escuela de Economía de Chicago." Enseñó en la Universidad de Chicago. Estudió, en realidad, en la Universidad de Chicago, y luego pasó a ser profesor allí mismo. Su mentor fue uno de los economistas más radicales del libre mercado de nuestra época, Friedrich von Hayek, quien también enseñó durante un tiempo en la Universidad de Chicago.

Y la Escuela de Economía de Chicago realmente representa esta contrarrevolución contra el Estado de bienestar. En los años cincuenta, Harvard y Yale y las 8 escuelas más prestigiosas de EE.UU. tendían a estar dominadas por economistas keynesianos, gente como el difunto John Kenneth Galbraith, que creía enérgicamente que después de la Gran Depresión, era crucial que la economía sirviera como una fuerza moderadora del mercado, que suavizara sus aristas. Y esto fue realmente el nacimiento del Nuevo Trato, del Estado de bienestar, todas esas cosas que actualmente hacen que el mercado sea menos brutal, sea alguna especie de sistema público de salud, seguro de desempleo, asistencia social, etc. Fue realmente – el período de posguerra fue un período de tremendo crecimiento económico y prosperidad en este país y en todo el mundo, pero realmente afectó los márgenes de beneficio de la gente más acaudalada en EE.UU., porque fue el período en el que la clase media realmente creció y explotó.

Así que la importancia del Departamento de Economía de la Universidad de Chicago es que realmente fue un instrumento de Wall Street, que financió muy, muy, considerablemente a la Universidad de Chicago. Walter Wriston, el jefe de Citibank, era muy amigo de Milton Friedman, y la Universidad de Chicago se convirtió en una especie de zona cero de esta contrarrevolución contra el keynesianismo y el Nuevo Trato para desmantelarlo. De modo que en los años cincuenta y sesenta, fue visto como muy, muy, marginal en EE.UU., porque el gran gobierno y el Estado de bienestar y todas esas cosas que se han convertido en algo como palabrotas en nuestro léxico gracias a la Escuela de Chicago – no tuvieron acceso a las salas del poder.

Pero eso comenzó a cambiar. Comenzó a cambiar cuando Nixon fue elegido, porque Nixon siempre estuvo muy unido a Milton Friedman, aunque Nixon decidió no abrazar esas políticas en el interior, porque se dio cuenta de que perdería la próxima elección. Y creo que aquí es donde se ve por primera vez la incompatibilidad de estas políticas de libre mercado con una democracia, con la paz, porque cuando Nixon fue elegido, Friedman fue introducido como asesor – contrató a todo un grupo de economistas de la Escuela de Chicago. Y Milton Friedman escribe en sus memorias que pensó que por fin había llegado su hora. Los trajeron desde los márgenes, y esta especie de grupo revolucionario de contrarrevolucionarios iba finalmente a desmantelar el Estado de bienestar en EE.UU. Y lo que sucedió en realidad es que Nixon, miró alrededor, consideró los sondeos y se dio cuenta de que si hacía lo que aconsejaba Milton Friedman, perdería con seguridad la próxima elección. Y por lo tanto, hizo lo peor posible, según la Escuela de Chicago: imponer controles de salarios y precios.

Y la ironía es que dos figuras clave de la Escuela de Chicago, Donald Rumsfeld, que había estudiado con Friedman como una especie de – supongo que en cierto modo fue como oyente a sus cursos; no estuvo matriculado como estudiante, pero describe su período como estudio a los pies de genios, y se describe como "joven cachorro" en la Universidad de Chicago – y George Shultz fueron las dos personas que impusieron controles de salarios y precios bajo Nixon y cuando Nixon declaró: "Ahora somos todos keynesianos." Así que para Friedman esto constituyó una terrible traición, y también lo hizo pensar en que tal vez no se podía imponer esas políticas en una democracia. Y Nixon dijo genialmente: "Ahora somos todos keynesianos," pero la pega es que no impuso esas políticas en el interior del país, porque le habrían costado la próxima elección, y Nixon fue reelegido con un margen de un 60% después de imponer controles de salarios y precios. Pero desató a la Escuela sobre Latinoamérica y convirtió a Chile, bajo Augusto Pinochet, en un laboratorio para esas ideas radicales, que no eran compatibles con la democracia en EE.UU. pero infinitamente posibles bajo una dictadura en Latinoamérica.

A. G: Explique lo que ocurrió en Chile.

N. K: Bueno, creo que los televidentes y auditores de Democracy Now! conocen ese capítulo en la historia, que fue que después de la elección de Salvador Allende, la elección de un socialista democrático, en 1970, hubo un complot para derrocarle. Nixon dijo genialmente: "Que la economía grite." Y el complot tuvo numerosos elementos, un embargo, etc. y finalmente el apoyo para el golpe de Pinochet el 11 de septiembre de 1973. Y escuchamos hablar a menudo de los Chicago Boys en Chile, pero no escuchamos tantos detalles sobre quiénes fueron en realidad.

Y por lo tanto, lo que hago en el libro es volver a contar ese capítulo de la historia, pero, para mí, la agenda económica del gobierno de Pinochet es mucho más frente y centro, porque pienso que conocemos los abusos de los derechos humanos, sabemos las redadas realizadas por Pinochet, cómo llevó a la gente a los estadios, las ejecuciones sumarias, la tortura. Sabemos algo menos sobre el programa económico que impuso en la ventana de oportunidad que le brindó el choque de ese golpe. Y es donde encaja en la tesis de la doctrina del choque.

Pienso que si se observa a Chile – y por eso pasé un buen tiempo en el libro observándolo y examinándolo – vemos a Iraq. Vemos a Iraq actual. Vemos tantas similitudes entre la intersección de una crisis manufacturada y la imposición posterior inmediata de una terapia de choque económico radical. De modo que pienso en la especie de paralelos entre el período de Paul Bremer en Iraq, cuando fue a Bagdad mientras la ciudad todavía ardía y simplemente – ya sabe, llegué al programa en la época hablando de como había desgarrado toda la arquitectura económica del país y la había convertido en este laboratorio de las políticas de libre mercado más radicales posibles.

Bueno, en Chile, el 11 de septiembre de 1973, mientras los tanques rodaban por las calles de Santiago, mientras el palacio presidencial ardía y Salvador Allende yacía muerto, hubo un grupo de así llamados "Chicago Boys," que eran economistas chilenos que habían sido llevados a la Universidad de Chicago para estudiar con una beca total del gobierno de EE.UU. como parte de una estrategia deliberada para tratar de orientar hacia la derecha a Latinoamérica, después de que se había ido tan lejos hacia la izquierda. Fue un programa muy ideológico financiado por el gobierno de EE.UU., parte de lo que el ex ministro de exteriores de Chile llama "un proyecto de transferencia ideológica deliberada," es decir, llevar a esos estudiantes a esa escuela muy extrema en la Universidad de Chicago e indoctrinarlos en un tipo de economía que era marginal en EE.UU. en la época y luego enviarlos a casa como guerreros ideológicos.

De modo que este grupo de economistas, que habían fracasado en el intento de ganar a los chilenos para sus puntos de vista cuando sólo formaban parte de un debate abierto, se quedaron en vela toda esa noche, el 11 de septiembre de 1973, y fotocopiaron un documento llamado "el ladrillo." Es conocido como "El Ladrillo." Y lo que era, era el programa económico para el gobierno de Pinochet. Y tiene esas sorprendentes similitudes, Amy, con la estrategia electoral de George Bush en 2000 – la plataforma electoral. Habla de una sociedad de propiedad, de la privatización de la Seguridad Social, de escuelas por contrato, impuesto de tipo único. Todo esto proviene directamente del guión de Milton Friedman. El documento estuvo en el escritorio de los generales el 12 de septiembre, cuando llegaron al trabajo el día después del golpe, y fue el programa para el gobierno de Pinochet.

Así que lo que hago en el libro es decir que estas dos cosas no constituyen una coincidencia. Cuando Pinochet murió – también murió – poco antes que Milton Friedman – escuchamos – o, en realidad, murió poco después de Milton Friedman – escuchamos esta narrativa en sitios como el Washington Post y el Wall Street Journal, que decía: "Por cierto, desaprobamos sus violaciones de los derechos humanos," y hacía como si hicieran gestos de desaprobación ante las atrocidades que sabemos en Chile, "pero en la economía fue sensacional," como si no hubiera conexión entre la revolución de libre mercado que pudo imponer y las extraordinarias violaciones de los derechos humanos que tuvieron lugar al mismo tiempo. Y lo que hago en el libro, y lo que hacen muchos latinoamericanos en su trabajo, es conectar evidentemente las dos cosas y decir que habría sido imposible imponer este programa económico sin la extraordinaria represión y la demolición de la democracia.

A. G: Hablemos del choque en el sentido de la tortura. Es donde usted comienza diciendo: "Vacío es hermoso." Háblenos de eso.

N. K: Bueno, comienzo el libro estudiando dos laboratorios para la doctrina del choque. Como dije anteriormente, considero diferentes formas de choque. Uno es el choque económico, y el otro es el choque corporal, los choques a la gente. Y no van siempre juntos, pero lo han estado en las coyunturas cruciales. Es el choque de la tortura.

Así que uno de los laboratorios para esta doctrina fue la Universidad de Chicago en los años cincuenta, cuando todos esos economistas latinoamericanos fueron entrenados para convertirse en terapeutas del choque económico. Otro – y no se trata de una especie de grandiosa conspiración, de que todo haya sido planificado, pero hubo otra escuela, que sirvió como una especie diferente de laboratorio del choque, que fue la Universidad McGill en los años cincuenta. La Universidad McGill fue el zona cero para los experimentos que la CIA financió para comprender cómo – básicamente cómo torturar.

Quiero decir, fue llamado "control de la mente" en la época o "lavado de cerebros" en la época, pero ahora comprendemos, gracias al trabajo de gente como Alfred McCoy, quien ha estado invitado en su programa, que lo que investigaban realmente en los años cincuenta bajo el programa MK-ULTRA, cuando hubo esos experimentos en electrochoques extremos, LSD, PCP, extrema privación sensorial, sobrecarga sensorial, que lo que realmente se desarrollaba era el manual que ahora podemos ver utilizado en Guantánamo y Abu Ghraib. Es un manual para deshacer personalidades, para la regresión total de personalidades, y la creación de esa ventana de oportunidad en la que las personas son muy sugestionables, como vimos en la película. Así que McGill, en parte porque creo que la CIA consideraba que era más fácil realizar esos experimentos fuera de EE.UU. –

A. G: McGill en Montreal.

N.K: McGill en Montreal. En aquel entonces, el jefe de psiquiatría era un individuo llamado Ewen Cameron. En realidad se trataba de un ciudadano estadounidense. Fue anteriormente jefe de la Asociación Psiquiátrica Estadounidense, lo que creo que es bastante relevante en cuanto a los debates que tienen lugar ahora mismo sobre las complicidades en la profesión psiquiátrica con las actuales técnicas de interrogatorio. Ewen Cameron era jefe de la Asociación Psiquiátrica Estadounidense. Fue a McGill para ser jefe de psiquiatría y para dirigir un hospital llamado el Allan Memorial Hospital, que era un hospital psiquiátrico.

Recibió financiamiento de la CIA, y convirtió el Allan Memorial Hospital en su laboratorio extraordinario para lo que ahora consideramos técnicas alternativas de interrogatorio. Dosificó a sus pacientes con esos extraños cócteles de drogas, como LSD y PCP. Los hizo dormir, en una especie de estado comatoso hasta durante un mes. Puso a algunos de sus pacientes en una privación sensorial extrema, y la intención era que perdieran la idea del tiempo y el espacio.

Y lo que creía Ewen Cameron, o por lo menos lo que decía que creía, era que toda enfermedad mental es aprendida más tarde en la vida, que esos eran patrones que se establecían más adelante en la vida. Era un psicólogo conductual. Y así, en lugar de llegar a la raíz de esos problemas y de tratar de comprenderlos, creía que la manera de tratar la enfermedad mental era tomar a pacientes adultos y reducirlos a un estado infantil. Y es un hecho bien conocido – y era bien conocido en la época – que uno de los efectos colaterales de la terapia de electrochoque era la pérdida de la memoria. Y esto era algo que era considerado, realmente, como un problema por la mayoría de los doctores, porque los pacientes eran tratados, pueden haber informado sobre algunos resultados positivos, pero olvidaban toda clase de cosas sobre su vida. Ewen Cameron estudió esta investigación y pensó: "¡Ajá!, esto es bueno," porque creía que eran los patrones que eran establecidos más adelante en la vida, que si podía hacer volver a los pacientes a un estado infantil, antes de que incluso poseyeran el lenguaje, antes de que supieran quienes eran, entonces esencialmente podía volver a criarlos, y entonces podría convertirlos en personas sanas. Así que ésta es la idea que atrajo la atención de la CIA, esta idea de inducir deliberadamente una regresión extrema.

A.G: Hable de la mujer a la que visitó en la casa de reposo, que había pasado por esto.

N.K: Sí. Comienzo el libro con el perfil de una mujer llamada Gail Kastner. Gail Kastner fue una de las pacientes de Ewen Cameron. Y leí sobre ella porque demandó con éxito al gobierno canadiense, que también financió a Ewen Cameron. Leí sobre su proceso, que acababa de lograr una importante victoria: recibió una indemnización porque había sido utilizada como conejillo de Indias en esos experimentos sin su conocimiento.

Así que la llamé, en realidad obtuve su número de la guía telefónica. Y primero se mostró extremadamente reticente de hablar. Dijo que odiaba a los periodistas, y que le era muy difícil hablar al respecto, porque volvería a vivir todas esas experiencias. Y yo dije, bueno – ella dijo: "¿De qué quiere que hable?" Y yo dije: "Bueno, acabo de volver de Iraq" y fue en 2004 – "y siento como que algo le ha sido hecho a usted, la filosofía de lo que le hicieron a usted, tiene algo que ver con lo que vi en Iraq, que fue ese deseo de dejar en blanco a un país y volver a comenzar de cero. E incluso pienso que algo de lo que vemos en Guantánamo con ese intento de imponer una regresión a los prisioneros mediante la privación sensorial y rehacerlos se relaciona también con lo que le sucedió a usted." Y hubo una larga pausa. Y dijo: "Bueno, venga a verme."

Así que volé a Montreal, y pasamos el día hablando, y compartió su historia conmigo. Habla de sus sueños eléctricos, es decir, no posee muchos recuerdos de lo que le sucedió en este período, porque sufrió un choque tan extraordinario y borró su memoria. Regresó al punto en el que chupaba su pulgar, orinaba en el suelo, no sabía quién era, y no tenía ningún recuerdo de eso, ningún recuerdo de que hubiera sido hospitalizada. Sólo se dio cuenta, creo, veinte años después, cuando leyó un artículo sobre un grupo de otros pacientes que habían demandado exitosamente a la CIA. Y extrajo unas pocas líneas en los artículos de la prensa – regresión, pérdida de lenguaje – y pensó: "Un momento, esto me suena como si fuera yo. Me suena como lo que he oído decir sobre mi persona." Y así, fue y consultó a su familia: "¿Estuve alguna vez en el Allan Memorial Hospital?" Y primero lo negaron, y luego lo admitieron. Pidió su archivo, y leyó que, sí, había sido admitida por el doctor Ewen Cameron, y vio todos esos tratamientos extraordinarios a los que había sido sometida.

A.G: Usted habló de Chile, hablemos de Iraq, de la privatización de la guerra en Iraq.

Hoy tenemos esta noticia urgente de Iraq. El gobierno iraquí dice que anula la licencia de la compañía de seguridad estadounidense Blackwater por su participación en un tiroteo fatal en Bagdad el domingo. El portavoz del Ministerio del Interior, Abdul-Karim Khalaf, dijo que ocho civiles fueron muertos y trece heridos, cuando contratistas de seguridad, que se cree trabajan para Blackwater EE.UU. abrieron fuego en un vecindario predominantemente suní en el oeste de Bagdad. Khalaf dijo: "Hemos anulado la licencia de Blackwater y les impedimos que trabajen en todo el territorio iraquí. También pasaremos a los involucrados a las autoridades judiciales iraquíes." No quedó en claro de inmediato si la medida contra Blackwater va a ser temporal o permanente. Naomi Klein, siga de ahí.

N. K: Bueno, es una noticia extraordinaria. Quiero decir, es realmente la primera vez que una de esas firmas mercenarias puede ser realmente considerada responsable. Sabe, como ha escrito Jeremy Scahill en su increíble libro "Blackwater: The Rise of the [World's] Most Powerful Mercenary Army," el verdadero problema es que no ha habido procesamientos. Esas compañías trabajan en esa zona absolutamente gris y, o son boy scouts y nada ha ido mal, lo que no corresponde en nada a lo que sabemos sobre la forma como se comportan en Iraq y al tipo de vídeos que hemos visto en línea sobre sus ejercicios de tiro contra civiles iraquíes, o la ilegalidad y la inmunidad con la que trabajan las han protegido. Así que si esto significa – si el gobierno iraquí realmente va a expulsar a Blackwater de Iraq, podría ser realmente un hito en cuanto a someter a esas compañías a la ley y cuestionar toda la premisa de por qué se ha permitido que tenga lugar este nivel de privatización y de ilegalidad.
Pero, sabe, mencioné que Donald Rumsfeld fue estudiante de Milton Friedman en los años sesenta, realmente, y el hecho sobre Donald Rumsfeld es que realmente fue más allá que su mentor, porque Milton Friedman, como dije anteriormente, creía que el único papel aceptable para el gobierno, era el mantenimiento del orden, eran las fuerzas armadas. Es lo único que pensaba realmente que debía hacer el gobierno; todo lo demás debía ser privatizado. Donald Rumsfeld estudió con Friedman, lo vio como un mentor, celebraba su cumpleaños con él todos los años, pero realmente llevó el asunto un paso más lejos, porque Rumsfeld creía que, realmente, el trabajo de mantenimiento del orden y del combate en la guerra también podía ser privatizado y subcontratado. Y lo dejó bien claro.

Esta fue realmente su misión de transformación, que pienso que no es comprendida realmente, lo radical que fue. Sabe, escuchamos esta frase, y escuchamos a Bush elogiando a Rumsfeld por su visión radical de la transformación de las fuerzas armadas, y todo es esa especie de clichés que son difíciles de comprender, pero si miramos lo que fue el historial de Rumsfeld, fue que – sabe, escribo en el libro que lo que realmente hizo – se trata de alguien quien, después que dejó el gobierno de Ford, pasó un par de decenios trabajando en los negocios y realmente se consideraba un hombre de la nueva economía.

Y, es algo en lo que pienso que la investigación que hice para "No Logo" realmente se entrecruza con esta etapa del capitalismo del desastre en el que estamos ahora mismo, porque Rumsfeld aprovechó la revolución en la percepción de marcas de los años noventa, en la proyección de marcas corporativos, en la que – y de eso es lo que escribí en "No Logo," en la que estaban todas esas compañías que solían producir productos y anunciaron con gran fanfarria que ya no producen productos, producen marcas, producen imágenes, y pueden dejar que otros, algo como contratistas inferiores, hagan el trabajo sucio de fabricar realmente cosas. Y esa fue la especie de revolución en la subcontratación, y ése fue el paradigma de la corporación hueca.

Rumsfeld proviene en mucho de esa tradición. Y cuando se estableció como Secretario de Defensa, llegó como lo hace un nuevo director general de la nueva economía que va a realizar una de esas reestructuraciones radicales. Pero lo que hizo fue tomar esa filosofía de esta revolución en el mundo corporativo y aplicarla a las fuerzas armadas. Y lo que supervisó fue el ahuecamiento de las fuerzas armadas estadounidenses, en el que esencialmente el papel del ejército es crear la percepción de marca, es mercadear, es proyectar la imagen de fuerza y dominación en el globo – pero subcontratando cada función, de la atención sanitaria – suministrando la atención sanitaria a los soldados – a la construcción de bases militares, que ya estaba ocurriendo durante el gobierno de Clinton, al papel extraordinario que Blackwater ha jugado y compañías como DynCorp, que – como sabe, como ha informado Jeremy, participan realmente en combates.

A.G: Y, en realidad, Blackwater que trabaja con soldados de Pinochet, pero en Iraq.

N. K: Sí, y quiero decir, esto es – vemos esas capas de continuidad. Quiero decir, Paul Bremer fue asesor de Kissinger durante el gobierno de Nixon cuando el apoyo para Pinochet fue tan fuerte. Así que existen todas esas capas de continuidad histórica. Y por eso, supongo, mi motivación para escribir el libro fue – no ha habido responsabilización por esos crímenes. Y en Latinoamérica, ha habido comisiones de la verdad, ha habido juicios. Los que estuvieron al centro de esta transformación muy violenta, mucho de ellos han sido realmente responsabilizados. No todos, pero muchos de ellos han sido realmente responsabilizados, si no en los tribunales, por lo menos ciertamente en una profunda e importante discusión pública de verdad y reconciliación. Pero en este país, eso nunca ocurrió, a pesar de que ha habido mucha información maravillosa de investigación. Y porque nunca ha habido alguna responsabilización, los mismos actores siguen realmente haciendo lo mismo ahora.

A. G: Hable, Naomi Klein, sobre la destrucción de Iraq. Hable sobre "Choque y Pavor," la terapia económica de choque de Paul Bremer, el choque de la tortura, así como la fusión de todas estas cosas en Iraq.

N. K: Sí, bueno, como dijera, en Chile vemos esta fórmula de triple choque y de tortura como imposición de estas políticas. Y pienso que vemos la misma fórmula de triple choque en Iraq. El primero fue la invasión, la invasión militar de choque-y-pavor de Iraq. Y si se lee el manual, el manual militar que explicó la teoría de choque-y-pavor – mucha gente piensa en el tema sólo como si se tratara de un montón de bombas, un montón de misiles, pero es realmente una doctrina psicológica, que en sí es un crimen de guerra, porque dice muy brutalmente que durante la primera Guerra del Golfo el objetivo fue atacar la infraestructura militar de Sadam; pero bajo una campaña de choque-y-pavor, el objetivo es la sociedad a escala mayor. Es una cita de la doctrina de choque-y-pavor.

Ahora, el ataque de sociedades a escala mayor es castigo colectivo, lo que constituye un crimen de guerra. No está permitido que los ejércitos ataquen a las sociedades a escala mayor; sólo está permitido que ataquen a los ejércitos. Así que esta fue – la doctrina es de verdad bastante sorprendente, porque habla de – habla de privación sensorial a escala masiva. Habla de cegar, de cortar los sentidos, a toda una población. Y lo vimos durante la invasión, el apagón de las luces, el corte de toda comunicación, el enmudecimiento de los teléfonos, y luego los saqueos, que no creo realmente que hayan formado parte de la estrategia, pero imagino que no hacer nada sí formó de alguna manera parte de la estrategia porque, por cierto, sabemos que hubo toda clase de advertencias de que había que proteger los museos y las bibliotecas y no se hizo nada. Y luego tenemos la famosa declaración de Donald Rumsfeld cuando fue confrontado con este hecho: "Cosas pasan."

Así que, fue, pienso – fue esta idea porque el objetivo era, usando la famosa frase del columnista del New York Times, Thomas Friedman, no construir la nación, sino "crear la nación," que es una idea extraordinariamente violenta, si uno se detiene y piensa en lo que significa crear una nación en una nación que ya existe, algo tiene que suceder a la nación que ya estaba allí, y hablamos de una cultura tan antigua como la civilización en sí. De modo que pienso que porque esta fue su idea de que partiríamos de cero y esta idea que es a menudo descrita en los medios de EE.UU. como idealista, de querer construir una nación modelo en el corazón del mundo árabe que se extendería a los países vecinos y llevaría a una apertura, esta idea de construir una nación modelo es – tiene toda clase de ecos coloniales. Realmente no puede ser hecho sin algún tipo de limpieza. Y por lo tanto, pienso que la facilidad, el nivel de acomodamiento con los saqueos, con la borradura de la historia iraquí, tienen que ser vistos con la visión de: Bueno, recomenzamos de cero. Así que todo lo que ya está allí constituye sólo un obstáculo. Así que lo cargamos en camiones y lo vendemos en Siria y Jordania, lo que de alguna manera facilita la tarea. Y por lo tanto, creo que vimos lo mismo a muchos, muchos niveles.

A.G: Naomi Klein, ¿cómo encaja Abu Ghraib en este cuadro?

N. K: Bueno, cito a Richard Armitage en el libro, diciendo que la teoría, que la teoría operativa en Iraq fue que los iraquíes quedarían tan desorientados por la guerra y por la caída de Sadam que serían fácilmente llevados del punto A al punto B. Ahora, como sabemos, no fue así. Y cuando Paul Bremer – cuando llegó Paul Bremer e hizo su cirugía radical del país, despidió a todo el servicio público iraquí – a gran parte de la administración iraquí, así como al ejército; declaró que abría a Iraq a los negocios, las importaciones baratas inundaron el país, las empresas iraquíes no pudieron competir. Ese primer verano, hubo una inmensa protesta pacífica ante la Zona Verde, y quedó en claro que simplemente no iba a ser posible llevar a los iraquíes del punto A al punto B.

Y después de eso, cuando apareció la primera resistencia armada en Iraq, la guerra fue llevada a las prisiones. Y esto también recuerda la visión de Donald Rumsfeld de ser esta especie de Secretario de Defensa director-general, porque, desde luego, como cualquier director general, escatimó personal para la guerra. Y no estaba en la posición, o la fuerza de ocupación estadounidense no estaba en posición, para encarar este dramático error de cálculo y esta especie de fantasía de que los iraquíes simplemente se comportarían y aceptarían esa terapia de choque económico y este – realmente este saqueo de su país. Así que cuando los iraquíes comenzaron a resistir, la represión de esa resistencia no pudo tener lugar en las calles, porque simplemente faltaba el poder personal.

Así que hicieron redadas de personas y las llevaron a las cárceles, y utilizaron la tortura, como fue utilizada en Latinoamérica, para enviar un mensaje a todo el país. Y la tortura es siempre – es tanto privada y pública al mismo tiempo. Y esto vale no importa quién la esté utilizando, el que para que la tortura funcione como un instrumento del terror estatal, no tiene que ver sólo con lo que sucede entre un interrogador y un prisionero; se trata también de enviar un mensaje a la sociedad en general: esto es lo os sucederá si os apartáis de la línea. Y creo que la tortura fue utilizada por la ocupación de EE.UU. de esa manera, no sólo para obtener información, sino como una advertencia al país.

A. G: Naomi, Quiero terminar esta parte de nuestra conversación realizando un viaje a la inversa. El presidente Bush acaba de ir del Bayou, de Nueva Orleans, a Bagdad. Volvamos atrás. Tanto usted como yo acabamos de estar en Nueva Orleans. También la vi hace dos años en Nueva Orleans, justo después del huracán. Coloque en este marco a Katrina y la reacción de EE.UU. ante el ahogamiento de la ciudad estadounidense.

N. K: Bueno, Nueva Orleans es un ejemplo clásico de lo que llamo la doctrina del choque o capitalismo del desastre, porque hubo ese primer choque, que fue el ahogamiento de la ciudad. Y como sabe, ya que acaba de volver de Nueva Orleans, no fue – no fue un desastre natural. Y la gran ironía del caso es que realmente fue un desastre de esta misma ideología de la que estamos hablando, el abandono sistemático de la esfera pública.

Y pienso, que cada vez vamos a ver esto, cuando hay veinticinco años de continuo abandono de la infraestructura pública, y el esqueleto del Estado – el sistema de transporte, las carreteras, los diques – son débiles y frágiles. Y la Sociedad Estadounidense de Ingenieros Civiles ha calculado que poner en condiciones el esqueleto del Estado costaría 1,5 billones de dólares, porque está tan debilitado: los puentes, las carreteras y los diques.

Y por lo tanto, lo que tenemos es una especie de tormenta perfecta, en la que el debilitado Estado frágil se entrecruza con un clima cada vez más peor, el que diría que también forma parte de este mismo frenesí ideológico en busca de beneficios a corto plazo y crecimiento a corto plazo. Y cuando estos dos entran en colisión, viene un desastre. Y es lo que ocurrió en Nueva Orleans. Los diques frágiles se entrecruzan con el mal tiempo, aunque ni siquiera fue tan malo. El huracán de Categoría Cinco no llegó realmente al lugar.

Y pienso que, haciendo una digresión, ya que estamos en Nueva York, que otro ejemplo verdaderamente poderoso de lo que pasó exactamente este verano cuando las estaciones de metro se inundaron fue – todos se horrorizaron, porque no llovió tanto. Pero la infraestructura estaba tan debilitada por el continuo abandono. Y ¿cuál fue el titular en el New York Sun? "Vendan los metros."

Primero se debilita la ideología, crea el desastre, y luego éste es utilizado como excusa para terminar la tarea, para privatizarlo todo, y es lo que sucedió en Nueva Orleans. Inmediatamente después que la ciudad se inundó, hubo esa campaña ideológica, la zona cero de la cual fue la Heritage Foundation en Washington, que siempre ha sido, supongo, el motor más poderoso por esta visión radical de libre mercado: es una tragedia, pero también es una oportunidad para rehacer por completo el Estado, es decir eliminarlo, como una explosión de escuelas por contrato – las escuelas públicas no fueron reabiertas. Fueron convertidas en escuelas por contrato. El hospital público, como el Charity Hospital, sigue cerrado con tablas. La vivienda pública – y es el ejemplo más dramático – esa horrible cita de un portavoz republicano: "No pudimos eliminar los proyectos de vivienda, pero Dios lo hizo diez días después de la ruptura de los diques." Es lo que quiero decir con la doctrina del choque, esa idea de aprovechar un desastre para imponer una privatización radical.
A.G: Naomi, al terminar esta hora, ¿qué es lo que la horrorizó más al investigar la doctrina del choque?

N.K: Me horrorizó que hay por ahí una reserva de literatura, que yo no sabía que existía, donde los economistas la admiten. Y es lo que supongo que es lo que más me excita en el libro es la cantidad de citas que tengo de propugnadores a muy alto nivel de la economía de libre mercado, todos desde Milton Friedman a John Williamson, quien es el hombre que acuñó la frase "el Consenso de Washington," admitiendo entre ellos, no en público, sino entre ellos, en algo como documentos tecnocráticos, que nunca han podido imponer una cirugía radical de libre mercado si no hay una crisis en gran escala, es decir que la misma gente que propugna que el mito central de nuestra época, que la democracia y el capitalismo van mano en mano, sabe que se trata de una mentira, y lo admite por escrito.





Amy Goodman. Nació el 13 de abril de 1957 en New York, Estados Unidos. Periodista y escritora. Conductora del programa Democracy Now! (Democracia Ahora!).

Naomi Klein es una de las plumas periodísticas e investigadoras más influyentes en el movimiento opositor a la globalización, nacida en Montreal (Canadá) en 1970. Es economista política, periodista y escritora. Caracterizada por su trabajo independiente en los medios periodísticos, colaboró como columnista para los periódicos como el The Guardian de Londres y The Globe and Mail de Toronto. Es la autora de No Logo: Taking Aim at the Brand Bullies.


Fuente: DemocracyNow! / Rebelión –Traducido del inglés por Germán Leyens

Saludos
Rodrigo González Fernández
DIPLOMADO EN RSE DE LA ONU
www.Consultajuridicachile.blogspot.com
www.lobbyingchile.blogspot.com
www.el-observatorio-politico.blogspot.com
Renato Sánchez 3586
teléfono: 5839786
e-mail rogofe47@mi.cl
Santiago-Chile
 
soliciten nuestros cursos de capacitación   y asesorías a nivel internacional

EE.UU. se replantea su poderío militar, comprometido por IrakN EL MUNDO

LOBBY EN EL MUNDO

EE.UU. se replantea su poderío militar, comprometido por Irak
ABC - Madrid,Madrid,Spain
La Asociación del Ejército de Tierra de Estados Unidos es una especie de «lobby» a favor del personal militar en activo. ...
Ver todos los artículos sobre este tema

Naranjo acusa ''presión vergonzosa'' de bancos por reforma previsional
El Mostrador - Providencia,Chile
El senador Jaime Naranjo (PS) calificó como una "presión vergonzosa" el lobby desarrollado esta semana en el Parlamento por el presidente de la Asociación ...
Ver todos los artículos sobre este tema

El Govern propone en la Feria de Frankfurt llevar a la pantalla ...
La Mañana Digital - Lleida,Spain
... Imre Török, acordaron impulsar un foro de asociaciones de escritores europeas para generar un lobby de presión que defienda los derechos de autor y ...
Ver todos los artículos sobre este tema

Saludos
Rodrigo González Fernández
DIPLOMADO EN RSE DE LA ONU
www.Consultajuridicachile.blogspot.com
www.lobbyingchile.blogspot.com
www.el-observatorio-politico.blogspot.com
Renato Sánchez 3586
teléfono: 5839786
e-mail rogofe47@mi.cl
Santiago-Chile
 
soliciten nuestros cursos de capacitación   y asesoríasEN LOBBY Y RSE  a nivel internacional

enviará carta

AQUI SE CONFIRMA LA NECESIDAD DE UNA PRONTA Y EFICAZ LEY DE LOBBY O CABILDEO
 
enviará carta

SENADOR NARANJO PS  reclama por lobby de Abif

(Publicado : 12/10/2007, 5:0 horas)



Indignado está el senador PS Jaime Naranjo por el intenso lobby que desplegó el presidente de la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (Abif), Hernán Somerville, junto a su gerente general, Alejandro Alarcón, para convencer a los parlamentarios de los "beneficios" de permitir la entrada de estas instituciones al giro previsional.

Es por eso que enviará hoy una carta al presidente de la Cámara Alta, Eduardo Frei, haciendo ver "su molestia" con esta situación, sobre todo porque es discriminatoria para otras organizaciones que también tienen derecho a defender sus intereses.

"No existe razón alguna para que recorrieran los pasillos del Senado y se reunieran en las oficinas con algunos senadores a través de citas concertadas con sus secretarias", dijo Naranjo y agregó que no había visto algo parecido desde el lobby desplegado por las industrias pesqueras.

Al respecto, ironizó señalando que "llamó la atención como se paseaban ambos personeros, parecían senadores designados".

Dijo que él mismo recibió una llamada de la secretaria de Somerville pidiéndole una entrevista personal, la que "no acepté, ya que tengo por norma escuchar las agrupaciones o personas involucradas en un determinado proyecto en la comisión respectiva, ya que eso resulta más transparente y adecuado".

Por último, dijo que "llama la atención que la misma derecha que cuestionó el supuesto lobby que habría desarrollado el candidato a fiscal nacional Juan Enrique Vargas, ahora reciba con tanto entusiasmo a Somerville".

AQUI SE CONFIRMA LA NECESIDAD DE UNA PRONTA Y EFICAZ LEY DE LOBBY O CABILDEO
 



 


Saludos
Rodrigo González Fernández
DIPLOMADO EN RSE DE LA ONU
www.Consultajuridicachile.blogspot.com
www.lobbyingchile.blogspot.com
www.el-observatorio-politico.blogspot.com
Renato Sánchez 3586
teléfono: 5839786
e-mail rogofe47@mi.cl
Santiago-Chile
 
soliciten nuestros cursos de capacitación   y asesorías LOBBY SIN CAER EN TRAFICO DE INFLUENCIAS a nivel internacional

La prescripción de medicamentos es un acto médico exclusivamente, según la AMM

 La prescripción de medicamentos es un acto médico exclusivamente, según la AMM

La Asociación Médica Mundial apoya que la prescripción de medicamentos forma parte inseparable del acto médico y por ello está reservada exclusivamente al ejercicio profesional del médico, para garantizar la adecuada atención médica al paciente

Madrid, 12 octubre 2007 (mpg/Azprensa.com)

En la Asamblea General de la Asociación Médica Mundial (AMM), que se ha celebrado en Copenhague (Dinamarca), y en la que España ha estado representada por el Consejo General de Colegios Médicos a través de su presidente, Isacio Siguero, el vicepresidente, Jesús Aguirre, y el coordinador de Relaciones Internacionales, José Ramón Huerta, se ha aprobado y/o admitido para su inclusión en grupos de trabajo posteriores, diversas propuestas, entre ellas un documento en el que se reconoce que la prescripción de medicamentos está reservada exclusivamente a los médicos.

La Asociación Médica Mundial apoya que la prescripción de medicamentos forma parte inseparable del acto médico y por ello está reservada exclusivamente al ejercicio profesional del médico, para garantizar la adecuada atención médica al paciente.

En una rueda de prensa celebrada esta mañana en la sede de la Organización Médica Colegial (OMC), los miembros de su Comisión permanente (Isacio Siguero, presidente, Jesús Aguirre, vicepresidente, Juan José Rodríguez Sendín, secretario, Francisco Toquero, vicesecretario, y Teodoro Sacristán, tesorero) han hecho una positiva valoración sobre los diversos documentos que abordan todo el espectro de la actuación médica a nivel mundial.

En concreto, estos documentos hacen referencia a la prescripción como un acto exclusivamente médico, los principios éticos de la telemedicina, la investigación en niños, la violación de los derechos humanos en Zimbawe, la responsabilidad de denuncia ante los casos de tortura y malos tratos, efectos del tabaco sobre el corazón, contaminación acústica, tejido humano para trasplantes y planificación familiar y derecho a la anticoncepción.


PROPUESTA DE RESOLUCION: LA PRESCRIPCION DE MEDICAMENTOS ESTA RESERVADA A LOS MEDICOS

1.-CONSIDERANDO que la prescripción de medicamentos al paciente forma parte ineludible e inseparable del acto médico, la prescripción de fármacos está reservada exclusivamente al médico.

2.-CONSIDERANDO que la prescripción de medicamentos exige inexcusablemente un diagnostico previo que solo puede realizar el médico.

3.-CONSIDERANDO que una adecuada atención al paciente, incluída la prescripción de medicamentos, debe garantizar la calidad asistencial y la seguridad del paciente, esta sólo queda garantizada a través del médico, que es el único profesional competente por formación y capacitación para garantizar una prescripción segura y de calidad.

4.-CONSIDERANDO que a través del acto médico y de la relación médico-paciente, el médico es quien mejor conoce y valora los problemas de salud del paciente y los relacionados con la medicación y su respuesta, la prescripción de fármacos debe quedar vínculada exclusivamente a la profesión médica.

Por lo tanto, la ASOCIACION MEDICA MUNDIAL:

Apoya que la prescripción de medicamentos forma parte inseparable del acto médico y que por ello está reservada exclusivamente al ejercicio profesional del médico.

Que por su cualificación, por su conocimiento de los problemas de salud del paciente y de los propios medicamentos, solo la profesión médica asegura una asistencia sanitaria segura y de calidad.

Insta a las autoridades sanitarias a la consideración permanente de que la prescripción de fármacos está reservada exclusivamente al médico para garantizar la adecuada atención médica al paciente.
Saludos
Rodrigo González Fernández
DIPLOMADO EN RSE DE LA ONU
www.Consultajuridicachile.blogspot.com
www.lobbyingchile.blogspot.com
www.el-observatorio-politico.blogspot.com
Renato Sánchez 3586
teléfono: 5839786
e-mail rogofe47@mi.cl
Santiago-Chile
 
soliciten nuestros cursos de capacitación   y asesorías  EN RESPONSABILIDADA MEDICA a nivel internacional

Discurso de la secretaria Rice en la Organización de los Estados Americanos

Discurso de la secretaria Rice en la Organización de los Estados Americanos

(Democracia es esencial para progreso social, político y económico en las
Américas)

"Existe sólo una fuerza capaz de sacar de la pobreza a la gente, de reducir
la desigualdad económica, y de arremeter contra la exclusión social en las
Américas, y eso es el crecimiento económico sostenido, impulsado por el
comercio justo y libre", dijo la secretaria de Estado Condoleezza  Rice en
el dicurso que pronunció en la Organización de los Estados Americanos
(OEA).

A continuación una traducción del discurso de la secretaria Rice:

(comienza el texto)

Declaraciones en la Organización de los Estados Americanos
Encuentro organizado por el Consejo de Relaciones Exteriores
Secretaria Condoleezza Rice
Washington D.C.
9 de octubre de 2007

SECRETARIA RICE: Muchas gracias. Gracias, Carla, embajadora Hills, una
amiga desde hace años, por tu amable introducción.

Me gustaría darle las gracias también al secretario general Insulza por
recibirnos aquí en la sede de la Organización de los Estados Americanos,
organismo al cual ha aportado usted un liderazgo fantástico y, de hecho, a
todo el hemisferio. Gracias.

También quisiera darle las gracias al Consejo de Relaciones Exteriores por
auspiciar este encuentro y por invitarme aquí para hablar ante ustedes.
Tengo que reconocer que nunca he visitado la oficina en Washington del
Consejo, a pesar de que he sido miembro de esta organización durante
muchos, muchos años. Pero eso se debe a que el Consejo aprovecha la
oportunidad de organizar sus encuentros en lugares maravillosos como este.
Es maravilloso estar aquí hoy en este magnífico salón.

Quiero darle las gracias también a los miembros del cuerpo diplomático que
se encuentran aquí y a los distinguidos invitados, damas, caballeros. Me
encuentro ante ustedes hoy para hablar sobre los acuerdos comerciales que
hemos concretado con Perú, Colombia y Panamá. El Congreso votará
próximamente sobre estos tres acuerdos. Estos acuerdos son importantes para
nuestra economía, pero también importan por el efecto que tendrán en
nuestros intereses nacionales, en nuestros intereses nacionales en este
hemisferio, en nuestra habilidad de dirigir dichos intereses de modo eficaz
y en nuestra capacidad de influir, de modo positivo, en los acontecimientos
que tengan lugar en esta región.

Lo que está en juego es el éxito de lo que denominaré nuestra comunidad
panamericana: la perspectiva de un hemisferio que consta de países
soberanos que viven en libertad, prosperidad y paz, una visión que los
dirigentes de Estados Unidos, de ambos partidos, han cultivado desde la
fundación de nuestra república. Por ese motivo, para entender el valor
verdadero de estos acuerdos comerciales, tenemos que tomar distancia
durante un instante y examinar nuestro hemisferio desde una perspectiva más
amplia.

En Estados Unidos siempre hemos considerado que somos parte de una
comunidad panamericana más amplia. Aquí, en la sede de nuestra unidad
hemisférica, la estatua de nuestro propio George Washington se alza
orgullosa junto a las otras de los liberadores de América: Juárez, Martí,
Bolívar, y muchos otros. Estados Unidos ha considerado siempre que nuestro
éxito está vinculado al éxito de nuestros vecinos, y en nuestros mejores
momentos hemos respaldado la independencia de América Latina, la política
del buen vecino, la Alianza para el Progreso, y hemos dirigido nuestros
esfuerzos a la creación de una comunidad panamericana próspera.

En el año 2001, el hemisferio estuvo muy cerca de concretar una histórica
transición hacia las sociedades libres, los libres mercados y la
democracia. Una de las primeras medidas del presidente Bush fue de apoyar
una iniciativa regional de formalización de este nuevo consenso en la Carta
Democrática Interamericana, la cual firmaron todos los países de la región,
con la excepción de uno solo, y que declara que "la democracia es esencial
para el desarrollo social, político y económico de los pueblos de las
Américas".

Desde entonces, los ciudadanos de la región, cuyos dirigentes elegidos
gobiernan en modo democrático, comercian libremente, abren mercados, luchan
contra la pobreza y amplían las oportunidades para todos, han reiterado
este consenso repetidas veces. Puede que las excepciones a esta norma sean
llamativas, pero se dirigen en dirección opuesta a la que se dirige el
hemisferio en su conjunto.

Lo que está claro es que la democracia es ahora el motor de cambio más
importante de nuestra región. Millones de personas que en otro tiempo
estaban al margen de sus sociedades-los pobres, los marginados, los pueblos
indígenas y los afrolatinos-se han convertido ahora en ciudadanos que
participan en sus sociedades. Y han lanzado lo que el presidente Bush ha
denominado una "revolución de las expectativas" en lo que respecta a
empleos buenos, oportunidades, seguridad personal y justicia social.

Gracias a la democracia, nuestros vecinos han vuelto a examinar sus
prioridades nacionales y han redefinido sus intereses nacionales, que han
perseguido en modo práctico. Nuestro hemisferio se vuelve más competitivo
en miles de maneras, y deberíamos tener presente que nuestros vecinos no
nos están esperando.

¿Cómo puede una democracia crear desarrollo económico y social para todos,
en especial para los 209 millones de hombres, mujeres y niños que viven aún
sumidos en la pobreza? Ése es el desafío definitivo que hoy encara nuestra
región. No es un debate sobre ideología, sino un debate sobre intereses.
Las democracias, tanto de izquierdas como de derechas, enfocan las reformas
de libre mercado que tuvieron lugar en la última década en la justicia
social, un enfoque que, francamente, no existía. Amplían el denominado
consenso de Washington para que se convierta en un nuevo consenso realmente
panamericano.

En cierto modo, la situación que atraviesa actualmente nuestra región
recuerda a la situación de Europa occidental en el último siglo, un momento
en que los viejos conflictos ideológicos dieron pie a un consenso cada vez
más amplio en apoyo de la libertad política y económica, un momento en que
las democracias luchaban por combatir la pobreza y crear un desarrollo
duradero. Y, lo que es más importante, un momento en que nosotros, en
Estados Unidos, ampliamos nuestra asistencia de seguridad, de diplomacia y
de desarrollo, abrimos nuestros mercados, y nos comprometimos de modo
estratégico, bipartidista y sostenido al éxito de nuestros aliados.

Hoy, contraemos un compromiso parecido con nuestro hemisferio para el éxito
de nuestra comunidad panamericana. Líderes de ambos partidos iniciaron este
compromiso en la pasada década. Ahora, se ha avanzando más en esa
dirección.

Hemos profundizado nuestra alianza histórica con los pueblos de la región,
los vínculos entre nuestra sociedad civil y nuestras empresas,
universidades y grupos religiosos. Ese fue el objetivo de la Conferencia
sobre las Américas organizada por la Casa Blanca en fechas recientes.

Al mismo tiempo, mantenemos nuestro profundo compromiso diplomático. El
presidente Bush ha realizado más viajes a países en este hemisferio que
cualquier presidente estadounidense. La visita más reciente tuvo lugar en
marzo, cuando dijo que la ayuda a las democracias latinoamericanas para
crear la justicia social para sus pueblos sirve los intereses nacionales de
Estados Unidos. Así que trabajamos de manera práctica y apoyamos el éxito
de todos los gobiernos democráticos responsables, tanto de izquierdas como
de derechas. No cobramos un precio ideológico por nuestra alianza.

Con la finalidad de fortalecer la comunidad panamericana, estamos
transformando nuestras relaciones con las principales potencias de la
región: Brasil, México, Chile y Colombia. Hemos encontrado propósitos
comunes que confieren una función de líder y parte interesada a democracias
en nuestra región y al sistema internacional más amplio. Al mismo tiempo,
hemos renovado nuestras relaciones con amigos en el Caribe y colaborado con
la comunidad internacional para reestablecer la estabilidad y la esperanza
en Haití.

Para proteger nuestra comunidad panamericana, hemos forjado un nuevo plan
de seguridad regional que se arraiga en la cooperación multilateral entre
las democracias y se enfoca en combatir las amenazas mundiales y
transnacionales a nuestro hemisferio, como por ejemplo las pandillas
criminales y el terrorismo, los desastres naturales y las enfermedades.

Para completar nuestra comunidad panamericana, ayudamos al pueblo cubano a
prepararse para la transición a la democracia. Aquí en este edificio se
encuentra la mesa que utilizaron los representantes de la Unión
Panamericana cuando se inauguró este edificio en 1910. Una de las sillas
originales en esa mesa tiene un rótulo que dice "Cuba". Pero hoy, cuando
las democracias de la OEA se reúnen, aquí mismo en la planta de abajo, Cuba
no tiene un silla en la mesa. El orgulloso pueblo cubano se merece libertad
y oportunidades, se merece el derecho a reclamar su lugar entre los países
libres de nuestro hemisferio.

Por último, para hacer llegar a todos la promesa de nuestra comunidad
panamericana, ayudamos a nuestras democracias amigas a crear oportunidades
y justicia social para sus pueblos, porque, tal como dijo una vez el
presidente Kennedy: a no ser que todos los hombres y mujeres de las
Américas "participen en la prosperidad cada vez mayor, fracasará nuestra
alianza, nuestra revolución, nuestro sueño y nuestra libertad".

El alivio de la deuda es uno de los modos en que podemos ayudar a ampliar
las oportunidades. Por ese motivo, hemos encabezado la iniciativa mundial
de perdonar deudas por más de 17.000 millones de dólares a nuestros vecinos
más pobres de la región. La asistencia extranjera también puede ayudar. Por
lo tanto, con el liderazgo del presidente Bush y el apoyo bipartidista del
Congreso, Estados Unidos ha duplicado la ayuda exterior que destina a este
hemisferio. Al mismo tiempo, a través de nuestra Corporación del Desafío
del Milenio, utilizamos nuestra asistencia como incentivo para que los
gobiernos consoliden las instituciones democráticas que combaten la pobreza
y la corrupción, inviertan en sus pueblos y creen desarrollo sostenible.

No obstante, en última instancia, existe sólo una fuerza capaz de sacar de
la pobreza a la gente, de reducir la desigualdad económica, y de arremeter
contra la exclusión social en las Américas, y eso es el crecimiento
económico sostenido, impulsado por el comercio justo y libre. Nuestros
vecinos entienden que el paradigma del desarrollo ha cambiado, que el
desarrollo en la región no puede ser interno solamente, sino que ha de
venir de la competencia exitosa en los mercados mundiales, y de las
instituciones democráticas que se utilizan para ampliar las oportunidades
para los pobres y los vulnerables.

Desde que tomó posesión del cargo, el presidente Bush ha hecho de la
ampliación comercial una de sus máximas prioridades. Aprovechando las bases
que sentaron los presidentes Bush y Clinton con NAFTA, hemos firmado
acuerdos comerciales con diez países más, de los cuales Perú, Colombia y
Panamá son los más recientes. Ahora tenemos el potencial de crear una
cadena ininterrumpida de socios comerciales desde Tierra del Fuego hasta el
Círculo Polar, una comunidad que ahora incluye Costa Rica, cuyos ciudadanos
votaron hace tan solo dos días a favor de aprobar el CAFTA. Nuestros
vecinos desean comerciar libremente con nosotros y ese debería enfocar la
atención de nuestro Congreso en su responsabilidad de cumplir nuestras
promesas con Perú, Colombia y Panamá.

Estos acuerdos comerciales beneficiarán a los trabajadores y las compañías
estadounidenses, permitiéndoles competir en igualdad de condiciones en los
nuevos mercados, crear empleos y oportunidades en nuestro país y abordar la
riqueza de todos en nuestra economía. Como dijo el presidente en fechas
recientes, los tres acuerdos "encarnan los valores del libre mercado:
normas transparentes y justas, respeto por la propiedad privada y
resolución de controversias de conformidad con el derecho internacional".

Estos acuerdos también contienen las obligaciones labores y ambientales más
estrictas de cualquier otro acuerdo comercial en cualquier parte del mundo.
Y esas obligaciones quedan supeditadas a los mismos procedimientos de
resolución de controversias, compensaciones y sanciones que rigen para las
otras disposiciones del acuerdo.

Ahora bien, sé que para muchos trabajadores estadounidenses, competir en la
economía mundial supone cierta desorientación e inseguridad, temen que los
empleos, ahorros y atención de la salud que tienen hoy puede que no existan
el día de mañana. Entiendo que muchos sienten que la globalización puede no
ser la marea que pone a flota todas las barcas. La responsabilidad de
fortalecer la situación de los trabajadores de este país se extiende al
quehacer diplomático de nuestro país, y yo me tomo muy en serio ese deber.
Por ello, nuestros diplomáticos emplean todos los artículos en la ley y
todos los medios de persuasión para proteger y promover los intereses de
los trabajadores estadounidenses en la economía mundial.

En Estados Unidos también tenemos que seguir invirtiendo en nuestros
pueblos. Justamente la semana pasada presencié una de esas inversiones a
largo plazo durante la visita que con mucho gusto realicé junto con el
congresista Charlie Rangel a la escuela Harriet Tubman en Harlem (Nueva
York). En esta extraordinaria escuela, niños marginados descubren a través
de la educación que sus horizontes no tienen límites. Es el tipo de
inversión que nosotros como país tenemos que realizar para preparar a todos
nuestros ciudadanos a alcanzar el éxito en el siglo XXI. Y junto con la
reorientación y la formación profesional, nuestros trabajadores no
necesitan un trato justo, puesto que, después de todo, la educación es la
fuerza más importante del mundo para la igualdad y la inclusión social y la
transformación personal.

Sé que los estadounidenses están bien preparados y que competirán bien. Por
lo tanto, confío en que aprobaremos estos acuerdos comerciales, en que
podemos avanzar en una economía globalizada como un país que está seguro de
sus dirigentes y de su capacidad de competir.

Pero les diría que, quizás el valor más importante de aprobar estos
acuerdos comerciales será el impacto positivo que tendrán en la prosperidad
y estabilidad de nuestra comunidad panamericana, una comunidad cuyo
bienestar es fundamental para los intereses de Estados Unidos.

Perú, Colombia, y Panamá están ahora  en el umbral de un éxito nacional de
gran alcance. Los acuerdos comerciales con Estados Unidos ayudarían a
impulsar mucho el desarrollo político, económico y social de nuestros
socios -- haciendo sus instituciones democráticas más transparentes y
responsables, más efectivas en combatir la pobreza y la corrupción, aplicar
la ley, e invertir en la educación, la salud y la oportunidad para sus
pueblos.

Al decretar en ley estos acuerdos comerciales, nuestro Congreso enviaría
una señal a cada ciudadano de estos países, a la gente de todo el
hemisferio y a los inversionistas de todo el mundo que Perú, Colombia, y
Panamá  están comprometidos con la democracia y el crecimiento económico,
que están institucionalizando sus reformas y que Estados Unidos está
completamente comprometido a que tengan éxito.

Ahora bien, sé que algunos se preguntan acerca del buen criterio  y
oportunidad de estos acuerdos. Algunos quizás se  pregunten: ¿Cómo podemos
darnos el lujo de aprobarlos ahora? Yo les preguntaría: ¿Cómo podemos
darnos el lujo de no aprobarlos ahora?

¿Cómo podemos dejar de cumplir nuestro acuerdo con Panamá? Un país que hace
apenas dos década fue gobernado  por un delincuente y narcotraficante
internacional; un país que ha abrazado la democracia y expande su economía
en más de 8 por ciento por año; y un país situado en la ruta navegable
estratégica -- del Canal de Panamá -- por el que dos tercios de sus
embarques anuales se dirigen a nuestra costa nacional. Un acuerdo comercial
con Estados Unidos podría ayudar a Panamá a transformarse de una vez por
todas en un pilar de estabilidad y prosperidad democráticas.

¿Cómo podemos dejar de cumplir nuestro acuerdo con Perú? Un país que apenas
hace una década fue destrozado por la violencia guerrillera y cuya economía
se desplomaba en picada; un país que está comprometido a sacar a sus
ciudadanos de la pobreza e instalarlos en la economía formal; y un país que
en el curso de dos administraciones democráticas, a pesar de la crítica en
el país y en la región, se ha resuelto a comerciar libremente con Estados
Unidos. Pocas cosas podrían ayudar a Perú a combatir la pobreza más
efectivamente que lograr su acuerdo comercial con nosotros.

Y quizás, sobre todo: ¿Cómo podemos dejar de cumplir nuestro acuerdo con
Colombia? Un país que, hace siete años --  hace apenas siete años estaba al
borde de convertirse en un estado fallido, cuyo territorio era refugio de
narcoterroristas y cuyo pueblo  huía de sus hogares por millares; un país
con el que nosotros como nación hicimos un compromiso estratégico, apoyado
por presidentes y Congresos de ambos partidos, y financiado con miles de
millones de dólares de ayuda de Estados Unidos; un país que, en los últimos
cinco años, ha reducido los secuestros en 76 por ciento, los atentados
terroristas en 61 por ciento y los asesinatos en 40 por ciento y que ha
ampliado el poder soberano de ese estado democrático y restaurado la
esperanza de su pueblo.

Reconocemos que este progreso contrasta con los acontecimientos sombríos
del pasado de Colombia, especialmente con el asesinato de líderes laborales
y de otras personas inocentes. Los crímenes como éstos nos preocupan
profundamente. Y el presidente Uribe ha comprometido a su gobierno a llevar
a los responsables ante la justicia, a proteger la vida y libertades de
todos sus ciudadanos y a demostrar que no habrá impunidad para ningún
crimen -- pasado, presente o futuro.

A pesar de sus conflictos actuales, Colombia va por una trayectoria de
cambio positivo -- políticamente, económicamente y socialmente.
Verdaderamente, la transformación de Colombia en menos de una década de
estado fallido a democracia próspera constituye una de las victorias más
grandes para la causa de los derechos humanos en nuestro mundo de hoy.

La aprobación de estos acuerdos comerciales no es un interés partidista con
miras estrechas; es de interés nacional crítico. Y los miembros de ambos
partidos lo comprenden. Comprenden también que estos acuerdos son un
paquete indivisible. En  palabras de 43 demócratas prominentes - ex
embajadores, funcionarios de gabinete, expertos de política y congresistas,
todos dijeron que "el rechazo de estos acuerdos retrasaría los intereses
regionales de Estados Unidos  durante una generación". De manera  que
necesitamos dejar absolutamente bien sentado las consecuencias de un
fracaso.

¿Qué señal enviaría el fracaso a nuestros socios democráticos en las
Américas?

Podemos contestar a esa pregunta con una palabra: retirada. Sería una
retirada de nuestra responsabilidad de liderazgo y una renuncia de nuestra
influencia en las Américas. Sería apartarnos de tres líderes democráticos
que representan las aspiraciones de sus ciudadanos de justicia social,
crecimiento económico y comercio con Estados Unidos. Y sería una retirada
de nuestro esfuerzo histórico y bipartidista de construir una Comunidad
Panamericana exitosa -- unida en la paz, en la prosperidad y en la
libertad.

Perú, Colombia y Panamá están entre nuestros mejores socios en la región.
Sus gobiernos han demostrado valentía y han hecho compromisos estratégicos
con nosotros con estos acuerdos comerciales. Las tres legislaturas de sus
países han aprobadlo estos acuerdos por amplios  márgenes y esperan que
Estados Unidos cumpla con su parte del trato.

Si no completamos estos acuerdos eso sería un gran golpe a estos tres
países y no podemos asumir que podrían recuperarse fácilmente. Enviaría una
señal clara a toda la región de que no se puede confiar en que Estados
Unidos cumpla sus promesas. A fin de cuentas, si no estamos dispuestos a
apoyar el éxito de Colombia, una nación a la que hemos comprometido miles
de millones de dólares en ayuda en el transcurso de muchos años, otros
tendrían el derecho de preguntar qué posibilidad hay de que nosotros los
apoyemos.

Debemos preguntarnos también: ¿Qué señal mandaría el fracaso a los enemigos
de la democracia en nuestro hemisferio?

Hay algunos en la región que quieren propugnar hacia un futuro de políticas
autoritarias y economías controladas por el estado. En verdad, esa  es una
agenda retrógrada con una larga historia de agudizar la pobreza y la
miseria. La revolución verdadera en las Américas la dirigen hoy líderes
democráticos responsables, como Bachelet y Lula, Vásquez y Uribe, García y
Torrijos, Calderón y Saca.

Sus gobiernos democráticos, y muchos otros, de izquierda a derecha,
profundizan el consenso panamericano de crear oportunidad para todos
mediante los mercados libres, el crecimiento económico y la democracia.
Esta es la verdadera historia de los últimos años: No el llamado "Giro a la
izquierda" del que tanto oímos.

El autoritarismo quizás sea una idea que compite con la democracia de
mercado libre, pero no es una alternativa -- porque una lleva al éxito y la
otra lleva al fracaso. Tratar de aliviar la pobreza y la desigualdad en las
Américas con el autoritarismo es como tratar de desafiar las leyes de la
gravedad. La única pregunta es cuánto daño hará a nuestra región esta
fallida idea. Y en gran parte grande, la respuesta está en nosotros -- en
si apoyamos a las democracias responsables que quiere más participación,
más asociación y más comercio con Estados Unidos. No menos.

Finalmente, debemos preguntarnos: ¿Qué señal mandaría el fracaso a las
naciones del mundo, a amigos y enemigos, a los aliados y a los enemigos. ¿A
ese respecto, cómo sería interpretado fracaso por un antiguo aliado como
Corea, que ha completado su propio acuerdo de libre cambio con nosotros?
Este acuerdo fortalecerá la economía de Estados Unidos  y ayudará a nuestro
aliado democrático a aumentar su seguridad y prosperidad en un Asia que
cambia rápidamente. Apoyamos plenamente nuestro acuerdo de libre comercio
con Corea y esperamos que el Congreso lo apruebe.

Señoras y señores, en este momento de oportunidad sin precedente, nosotros
en Estados Unidos no podemos ser introvertidos, ser temerosos, hablar de
las acciones de otros o dudar y desesperar. En vez de eso, debemos seguir
siendo lo que los estadounidenses siempre hemos sido -- optimistas y,
definitivamente, sí, idealistas. Debemos seguir abiertos al mundo y seguir
activamente comprometidos. Debemos preparar a nuestros pueblos,
especialmente a nuestros niños, con la educación y las oportunidades que
alimentan y nutren la esperanza en el futuro. Y sobre todo, debemos estar
seguros de nuestra habilidad de competir y prosperar -- no como un país,
sino como parte de una Comunidad Panamericana.

Hace casi 100 años, al dedicar este edificio, mi antecesor Elihu Root, el
primer secretario de Estado en viajar a América Latina, describió este
edificio como "una expresión verdadera de Panamericanismo...una declaración
de la lealtad a un ideal" y un recordatorio "de la afirmación perpetua de
unidad, interés común, propósito y esperanza entre las repúblicas".

Eso era entonces y sigue siendo hoy.

El ideal fundador de nuestra Comunidad Panamericana, que perdura a través
de muchos siglos y que mantenemos, es la esperanza de que la vida en el
hemisferio signifique una ruptura con el Viejo Mundo y un nuevo principio
para toda la humanidad: la promesa de libertad y dignidad, y gobierno según
la ley, la oportunidad de realizar todo su potencial, sin importar la clase
o cultura, raza o religión, y la creación de un nuevo sistema político
internacional, basado en el respeto mutuo  y la cooperación entre las
naciones independientes.

Nosotros y nuestros vecinos en este hemisferio estamos ahora más cerca que
nunca de lograr ese ideal. Y ahora, como antes, Estados Unidos tiene una
responsabilidad especial de seguir adelante. Por lo tanto, cumplamos los
acuerdos con nuestros socios - Perú, Colombia y Panamá -- y mostremos al
mundo que la Comunidad Panamericana está viva y bien y sigue siendo una
esperanza para toda la humanidad.

Muchas gracias.

(termina el texto)

(Distribuido por la Oficina de Programas de Información Internacional del
Departamento de Estado de Estados Unidos. Sitio en la Web:
http://usinfo.state.gov/esp)
Saludos
Rodrigo González Fernández
DIPLOMADO EN RSE DE LA ONU
www.Consultajuridicachile.blogspot.com
www.lobbyingchile.blogspot.com
www.el-observatorio-politico.blogspot.com
Renato Sánchez 3586
teléfono: 5839786
e-mail rogofe47@mi.cl
Santiago-Chile
 
soliciten nuestros cursos de capacitación   y asesorías a nivel internacional